Víctor Fernández siempre ha sobresalido por su buen discurso. Por una forma de predicar que llega, y que el pasado domingo, antes del partido ante el Tenerife y con el Real Zaragoza en una situación realmente complicada, utilizó para motivar a sus jugadores antes de saltar al verde de La Romareda.

Fue en el mismo vestuario del estadio municipal, instantes antes de que el grupo entonase el característico grito de guerra, y Víctor trató de tocar la fibra de sus hombres con unas palabras que hacían referencia incluso a sus familiares.

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“Hemos trabajado muy bien. Os lo digo de verdad. Y ahora es el momento de disfrutar. Es vuestra oportunidad, que son los noventa y tantos minutos que estéis en el campo”, se arranca Víctor, antes de recordar a sus futbolistas que tienen que jugar “por el escudo” y por sus “familiares”.

“Ellos también lo estarán pasando mal”, dice el técnico, refiriéndose a estas semanas de resultados complicados, que habían situado al Real Zaragoza más cerca que nunca de la zona roja del descenso. 

Las palabras del preparador zaragozano tuvieron efecto y el equipo acabó con su mala racha de resultados. Venció por 3-1 al Tenerife y tomó aire hacia lo que viene, aunque tendrá que seguir remando para crecer en la tabla clasificatoria. 

Fue un Domingo de Resurrección para el cuadro zaragocista, que esta próxima jornada (sábado, 18.30) visitará el estadio Ciudad de Valencia para medirse con uno de los 'huesos' de la categoría de plata, un Levante que no atraviesa su mejor momento de forma, pero que es muy difícil de doblegar a domicilio.