En la tarde de este jueves se ha conocido un nuevo horario y fecha de partido en Segunda División, el correspondiente a la jornada 25, la cuarta de la segunda vuelta, que enfrentará al Real Zaragoza contra el Sporting de Gijón en La Romareda. Y será, de nuevo, fuera del fin de semana, en día laboral. 

La Liga ha ubicado el partido entre aragoneses y asturianos el lunes 5 de febrero a las 20.30 en el estadio municipal zaragozano. Una circunstancia que trastoca de modo irresoluble la presencia 'in situ' de varios miles de socios, abonados o accionistas del Real Zaragoza en sus localidades de La Romareda, impidiéndoles acudir a su ansiada cita cada 15 días con los partidos de su equipo. 

Que el fútbol se juegue fuera del fin de semana, extirpado de la franja semanal del ocio y el descanso de la inmensa mayoría de la población, es una cortapisa insalvable para infinidad de sectores. Los trabajadores, por supuesto, se encuentran con incompatibilidades de índole laboral. Las personas mayores y los niños y adolescentes (con obligaciones lectivas lejos de los sábados y los domingos) son otro amplísimo nicho de afectados. Los residentes en pueblos, ciudades y áreas ajenas al casco urbano de Zaragoza capital componen otro contingente masivo de damnificados. Y hay más. 

Cifras y datos que denuncian agravios indiscutibles

Las cifras denuncian agravios indiscutibles. A expensas de que vayan surgiendo nuevos horarios en la segunda vuelta de la liga, que ser reanuda ya este fin de semana próximo tras tres semanas de parón navideño y de fin de año, cuando se juegue ese partido contra el Sporting de Gijón en La Romareda el 5 de febrero el Real Zaragoza habrá comparecido ya 13 veces en su estadio, con su público, que con 28.882 abonados conforma la afición más numerosa de toda la Segunda División y está en el top-10 del fútbol español, Primera incluida. 

Y de esos 13 partidos en La Romareda, 7 habrán transcurrido en fechas laborales (lunes o viernes) y solo 2 en domingo. Es una evidencia que La Liga sigue estigmatizando a la afición zaragocista con sus designaciones, según avanza el torneo. A muchos, el precio de su abono empieza a no serles rentable. Y ello puede repercutir perniciosamente en los intereses de la SAD, sometida a los propios reglamentos y normas de la propia Liga, si el año que viene ese modelo de abonados se dan de baja por razones lógicas y fundadas. Uno de los parámetros claves para tener mayor techo salarial y capacidad de inversión lo sustenta la propia Liga en el número de abonos que tienen las SAD o clubes. Paradójico. Una espiral, un tirabuzón perjudicial para el Real Zaragoza cuyo origen está en su propia patronal o ente rector de sus intereses mayores. 

Fuera del fin de semana ya se jugó ante el Valladolid (viernes), Racing de Santander (viernes), Oviedo (lunes), Levante (miércoles) y se jugará contra el Andorra (viernes 19 de enero) y el referido ante el Sporting (lunes 5 de febrero). Cabe incluir aquí el duelo de septiembre ante el Eldense, que se dató en lunes y que, muy a última hora, a requerimiento sonoro del club zaragocista, se adelantó 'in extremis' al domingo dado que los internacionales sub-21 iban a ser impedidos de jugar con el equipo de modo evitable y, excepcionalmente, se atendió la protesta del Real Zaragoza. Pero aquel partido iba en lunes.

Dentro del fin de semana han caído 6 partidos en La Romareda. Y 4 de ellos se fueron al sábado: ante el Villarreal B, el Eibar, el Huesca y el Leganés. Así, solo ha habido fútbol en domingo en Zaragoza por designación voluntaria de La Liga dos veces: los días del Mirandés y del Alcorcón. No hay más que decir, señorías.