real zaragoza
El Real Zaragoza negocia una solución para la salida de Gaetan Poussin
El club y el portero negocian una fórmula de salida, sin descartar la rescisión de su contrato trienal. El futbolista acepta marcharse, pero prioriza regresar a su país y estudia opciones
El Real Zaragoza y Gaetan Poussin negocian ya la salida del portero después de que el director deportivo Juan Carlos Cordero le informara, tal y como advirtió el pasado martes en la presentación de Edgar Badía, que esa solución es lo más conveniente para todas las partes. Ahora, las conversaciones giran sobre dos vértices: la fórmula mediante la que el guardameta francés consuma su marcha del Real Zaragoza en este mercado de enero y las posibles propuestas que le puedan llegar en las tres próximas semanas.
El futbolista acepta la decisión del club y está dispuesto a salir. Pero hay un asunto que condiciona cualquier mecanismo de acuerdo: los tres años de contrato que le firmó Juan Carlos Cordero el pasado verano cuando se le incorporó desde el Girondins de Burdeos a cambio de derechos futuros. Poussin tiene contrato hasta 2026 y eso marca los pasos de la negociación. En los primeros contactos se están barajando diferentes posibilidades, siempre en función del destino que se le pueda abrir al portero en Francia, adonde tiene decidido regresar. Allí tiene cierto mercado y sus agentes ya estudian alguna opción formal para que Poussin continúe allí su carrera, en la Ligue 2.
No se descarta la rescisión de contrato si se llega a un acuerdo económico entre el Zaragoza y el portero. El club va a tratar que esta operación le suponga el menor coste salarial en forma de indemnización, por lo que también se baraja una fórmula intermedia, similar a la que trajo a Poussin al Zaragoza hace solo unos meses: el traspaso a coste cero otro club, tras el pago de un importe como compensación -posiblemente lo que queda de esta temporada-, siempre y cuando Poussin pueda garantizarse un contrato con una duración y unas cantidades similares a las comprometidas en el Real Zaragoza.
La fórmula menos viable es la cesión simple porque la intención del club aragonés es desprenderse del contrato del guardameta francés en vistas a la próxima temporada. Su planificación futura de la posición no contempla ya a Poussin: Cristian Álvarez tiene contrato, Dani Rebollo también, existe una cláusula obligatoria de compra en caso de ascenso en la cesión desde el Elche de Edgar Badía y, además, Cordero anda detrás de Juan Soriano, guardameta titular del Tenerife -él lo fichó para el conjunto tinerfeño- que acaba contrato el 30 de junio y aún no ha renovado.
De este modo, el Zaragoza tiene un plazo de veinte días para dar forma a la salida de Poussin. Los plazos los marca, en todo caso, la velocidad a la que el portero francés pueda negociarse un nuevo destino. A partir de ahí, su marcha se agilizará. Es asunto crucial, en parte, porque el Zaragoza cuenta ahora con cuatro porteros en dinámica del primer equipo, una cifra desmedida y que Juan Carlos Cordero ya reconoció esta semana que había que reducir: "Tenemos cuatro porteros, aunque Rebollo tenga ficha del filial. Posiblemente Poussin tendrá que salir. Lo mejor para el club y para el jugador es que busquemos una salida. No por licencias, sino por una situación personal y deportiva del futbolista".
La apuesta por Poussin y la planificación de la portería representan uno de los principales deslices en la gestión de Juan Carlos Cordero quien, ante la lesión de Cristian, los errores del francés y el bajo rendimiento de Rebollo, se ha visto obligado a darle una vuelta al puesto y fichar necesariamente a Edgar Badía en el mercado de enero.
