real zaragoza

Escribá: "No siento que se acabe mi tiempo"

El entrenador del Real Zaragoza, que admite que "estoy evidentemente cuestionado", sigue dando vueltas a la misma noria de muletillas de los últimos dos meses sobre la resurrección del equipo, K.O. desde mitad de septiembre. 

Fran Escribá atiende una pregunta en la rueda de prensa de este viernes antes del partido ante el Huesca.
Fran Escribá atiende una pregunta en la rueda de prensa de este viernes antes del partido ante el Huesca.
RZ

Fran Escribá se sabe tocado, si no hundido. El entrenador del Real Zaragoza llega al partido de este sábado ante el Huesca en La Romareda con escaso crédito, tal vez cercano a nulo, tras dos meses de marcadores y rentas desastrosas en un club que aspira a la zona alta de la tabla, con solo 7 puntos sumados de los últimos 30 disputados y con una eliminación copera a manos de un equipo de la 5ª categoría (eso es la Tercera RFEF), el Atzeneta valenciano, que ha dinamitado el ambiente externo del zaragocismo y, lo más relevante, el interno de la SAD.

Aun así, el técnico sigue enrocado en su noria de respuestas recurrentes, idénticas en los últimos dos meses de crisis galopante e irremediada. La rueda de prensa previa al duelo de la 16ª jornada ante los oscenses ha sido, en líneas generales, más de lo mismo. Impertérrito.

"Estamos fastidiados, porque fallamos en los últimos días. Tanto en liga como en Copa. En liga fue ante un gran rival (el Elche), pero en Copa fue un palo gordo, por inesperado. Pero ante algo así no te queda otra alternativa que pensar en lo que viene. Y tenemos la obligación de afrontar este siguiente partido con las mismas ganas y fuerza de siempre", comenzó su discurso repetitivo Escribá este viernes. 

De entre el aluvión de lugares comunes que transitó Escribá durante 20 minutos de incómoda presencia ante los periodistas (nunca le gustó este capítulo), algunas frases y pasajes caben destacarse a estas alturas de una película de miedo que parece acercarse al 'Fin' o 'The End'. 

"En absoluto temo por mi situación, no. Me habéis visto hablando con Juan Carlos Cordero estos días, pero es lo que hago todas las semanas. Y tres cuartos de lo mismo con Raúl Sanllehí. Yo sé la confianza que tiene el club en mí, pero no quiero decirla yo, es cosa nuestra. Sentimos que esta plantilla y este cuerpo técnico es el mismo que hizo un inicio de temporada excelente, solo que ahora está fallando. Pero la confianza es absoluta. El análisis de lo que pasa dice que se nos han dado situaciones anómalas en el fútbol y por eso estamos así", reiteró sobre un mensaje que ya tiene días y días de vigencia, entre tropezón y tropezón en el último mes largo. 

A Escribá se le expuso que, dentro de su insistencia argumentaria de semanas y semanas, quizá pueda estar ya al borde consumir su tiempo de sujección por parte de los ejecutivos del club, dado que el equipo no sale del laberinto negativo. "No, no siento que se acabe mi tiempo. Sinceramente. No es un cliché, lo digo porque lo siento. No trato de ganar tiempo. Es convencimiento. Sé que los datos son lo que son, pero siempre digo que hemos estado varias veces a punto de revertir la situación. Mi confianza sigue intacta. Es lo que creo. Me fastidia que sea una semana más y no haya ocurrido. Pero espero ganar ya y nos liberemos de estas semanas tan feas", respondió.

Escribá, que se mostró totalmente abatido en Onteniente el martes tras caer en Copa con el Atzeneta, tres días después ha querido mostrar una cara más fuerte. Puesta en escena la frase, le ha quedado así: "Esta no es la situación más complicada de mi carrera. En Elche, en su momento, fue mucho más duro, parecía algo insalvable. Y al final fui y lo saqué. He vivido situaciones muchísimo más difíciles. Yo estoy absolutamente convencido de que esto lo vamos a sacar adelante", repitió por enésima semana. 

Singular fue su alegato sobre las evidentes críticas ácidas que se multiplican sobre su persona en las últimas 72 horas. "Entiendo que la gente tenga dudas. Pero lo mismo que yo no creía en la euforia de los primeros cinco partidos, tampoco ahora comparto esa tristeza de la gente. Este equipo y este cuerpo técnico tiene mucho compromiso. Nadie puede dudar del zaragocismo de David Generelo, por ejemplo", adujo, utilizando por primera vez el comodín del público con el rostro de su segundo y ayudante, el exfutbolista zaragocista.

Escribá, por último, fue preguntado por lo que cambiaría, tanto en conducta como en mensajes orales, respecto de lo que ha venido utilizando en las últimas 8 semanas, en las que ha aludido a pesimistas, cenizos, forofos, incrédulos... cuando le escocían las críticas a sus indefendibles malos pasos: "Es evidente que hemos cometido errores graves. Si pudiera, intentaría volver atrás y que no hubieran sucedido. Fueron, pasaron... y ya está. Lo que somos, muchas veces, viene de la suma de nuestros fracasos y errores. Para ganar, muchas veces por el camino has de perder. Yo sé que, de repente, ganaremos y todo cambiará", respondió, sin entrar ni un segundo en su currículum de frases con epítetos y calificativos al entorno zaragocista que, en estos momentos ya muy difíciles para él, se le han vuelto en contra sin remedio. 

Solo al final, cuando hablaba del portero Poussin y sus gruesos errores que han acrecentado el calibre de la crisis del equipo, a Escribá se le escapó lo que evitó asumir durante un cuarto de hora: "Estoy evidentemente cuestionado", dijo en un pasaje de la respuesta, cotejándose con el guardameta francés.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión