real zaragoza

Una mañana entera para preparar el 'peligroso' partido de Miranda

En el seno del Real Zaragoza se quiere eliminar cualquier tipo de euforia tras las dos victorias consecutivas y dar el valor correcto al choque de Anduva, donde el rival, el Mirandés, es el actual colista con solo 2 puntos. 

Eugeni, Francho y Azón, tras la red de una portería en el entrenamiento del Real Zaragoza.
Eugeni, Francho y Azón, tras la red de una portería en el entrenamiento del Real Zaragoza.
Oliver Duch

La plantilla del Real Zaragoza ha invertido toda la mañana en una tarea que ha mezclado la preparación física, la táctica y, sobre todo, la mental de cara a afrontar el denominado 'peligroso' partido del próximo sábado en Anduva ante el Mirandés. Un rato largo de gimnasio, el habitual entrenamiento sobre el césped de la Ciudad Deportiva (impecable el recién instalado en el campo principal de trabajo del primer equipo) y los primeros inputs anímicos sobre los futbolistas han redondeado un martes importante tras las dos victorias consecutivas obtenidas ante la Ponferradina y el Sporting de Gijón en apenas seis días.

Y es que la próxima cita en Miranda de Ebro se quiere tratar con especial cuidado, por el perfil que ha adquirido este choque en el pequeño campo de la localidad burgalesa: el MIrandés es el colista actual de la liga, con solo 2 puntos sumados de los 18 disputados. Una imagen en la clasificación que tiene mucho de venenosa para el Real Zaragoza, pues puede tender a una falsa euforia si se entremezclan nocivamente los sentimientos de fervor que provocan los dos triunfos recientes de los blanquillos y ese primer golpe visual de ver al rival en serios apuros clasificatorios, con unos números que parecen sugerir que el enfrentamiento sabatino va a ser más sencillo que cualquiera de los anteriores ante Las Palmas, Levante... Eso se quiere evitar de raíz y el cuerpo técnico, sin Juan Carlos Carcedo al frente de modo excepcional, ya se ha puesto manos a la obra en ese sentido. Carcedo ha viajado a Madrid para estar presente en una reunión importante de todos los entrenadores de la Liga de Fútbol Profesional y se reincorporará a las rutinas en la sesión del miércoles. 

La sencillez, la humildad en los planteamientos de cada partido, es pauta firme en el cuerpo técnico del Real Zaragoza. Nada de pérdidas del norte, ni cuando los marcadores son adversos o no positivos -como sucedió hasta hace un par de semanas-, ni en la bonanza de las victorias, circunstancia que se da ahora mismo. Así que la plantilla zaragocista acudirá a Miranda de Ebro con la mentalidad de acometer un choque de la máxima dificultad y ante un adversario que es capaz de tumbar a cualquiera, por más que su posición puntual en estos momentos pueda llevar a un engaño que se desea diluir y eliminar lo antes posible en la mente de cada protagonista del equipo y, a ser posible, trasladar esa idea también fuera del vestuario, a una afición que vive con ilusión el presente de la competición después de la buena imagen dejada por el Real Zaragoza en las dos últimas citas ligueras. Este es el leitmotiv de la semana en curso, que ha tenido este martes su primer día de labor tras dos jornadas de descanso, domingo y lunes: máximo respeto y consideración con el Mirandés, alerta máxima en el método de preparar la disputa de esos 3 puntos que, de lograrse el sábado, llevarían a los de Carcedo a la zona noble de la tabla mucho tiempo después tras dos temporadas de serios agobios deportivos. 

Azón, a tope, y sin centrales del filial

Hasta las 12 menos veinte de la mañana no pisaron los jugadores la hierba, tras una fase de gimnasio y tonificación muscular, en muchos casos personalizada, en las nuevas instalaciones construidas a tal efecto junto a los vestuarios de la Ciudad Deportiva (una de las primeras mejoras que están en marcha en los terrenos de la carretera de Valencia). En el grupo destacó la presencia de Iván Azón sin ningún tipo de mermas, a tope, como el resto. El delantero centro aragonés, que se estrenó en esta temporada en los últimos minutos frente al Sporting tras mes y medio de baja por una lesión de rodilla, está ya cerca de poder optar a la titularidad de nuevo. 

Y también se evaluó con detenimiento que no había ningún defensa central del filial, el RZD Aragón, en el grupo de trabajo. Con Francés lesionado (en un codo) y Quinteros ausente toda la semana porque está convocado con la selección nacional de Bolivia (juega el sábado también, en la ciudad francesa de Orleans ante Senegal), Carcedo tiende a viajar a Miranda con solo dos zagueros centrales, los titulares de los últimos dos partidos, Jair y Lluís López. Salvo cambio de parecer con el paso de las horas, el técnico zaragocista confiará como relevo susceptible de estos en caso de necesidad en el lateral zurdo Nieto e, incluso, en el medio centro Petrovic

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión