Juan Manuel Sanabria ya es, a todos los efectos, jugador del Real Zaragoza y, si no hay novedad inesperada de última hora, debutará el viernes por la noche en La Romareda frente a la Ponferradina en el segundo partido de la segunda vuelta de la liga, con el equipo aragonés en puntuación de colista tras el triunfo del Albacete en la noche del martes en Alcorcón. El joven centrocampista, de 20 años y 1, 74 de estatura, que llega cedido por el Atlético de Madrid, fue presentado al mediodía de este miércoles en La Romareda y ante la prensa en una conferencia telemática. 

De sus palabras, llenas de seguridad personal, de ilusión por triunfar en el mundo de fútbol y de autoestima, destacó el guiño que hizo a dos de sus compatriotas legendarios que triunfaron en su día como zaragocistas. "Rubén Sosa, Poyet... espero no ser menos que ellos en cuanto a la aportación de dinámica al equipo", planteó en voz alta, todo un reto, una declaración de intenciones de muy altos vuelos para Sanabria, que no se quedó corto en la comparativa. 

Sanabria sabe que, a mitad de temporada y con el equipo sumido en problemas clasificatorios de primer orden, no va a tener espacio para su aclimatación, acomodamiento de costumbres o engranaje con el resto del equipo. Todo ha de ser rápido, ya mismo. "Me siento preparado para ello. Yo voy por etapas desde que vine a España, aún en edad juvenil y tras pasar por el filial del Atlético. Creo que estoy ya preparado para jugar en Segunda y vengo a sumar de inmediato", admitió el charrúa sin rodeos. 

Miguel Torrecilla, el director deportivo del Real Zaragoza, quien ha sido su mentor en esta operación un tanto sorprendente por el perfil final que va a tener el refuerzo para la línea medular (alejado de la experiencia e, incluso, la envergadura física que se barruntó en otros pretendidos en días anteriores para este puesto), aprovechó en esta ocasión la presentación del fichaje para exponer abiertamente lo que se espera con él. Fue el modo de describirle a todo el mundo las cualidades de un Sanabria que queda a desmano de la mayoría al no haber jugado aún en el fútbol profesional con asiduidad.

"Es un centrocampista mixto, un 'todocampista' según se define últimamente. Capaz de aportar una intensidad altísima al juego, un futbolista de ida y vuelta. Es un jugador que participa en la línea creativa, capaz de desatar líneas y que es importante en el robo trás pérdida", apuntó Torrecilla en su retrato del uruguayo.

A su vez, Sanabria apuntó algún detalle más poco más tarde. "Soy un jugador de mucho recorrido sin balón, puedo jugar en varios puestos del medio campo. Y, con el balón, soy zurdo y me considero técnico. También me siento con confianza en el balón parado, puedo ayudar mucho al Real Zaragoza en esto, dar asistencias en la estrategia porque veo que hay gente muy grande que puede rematar", dijo el de Montevideo. 

Es llamativo que, en lo que va de temporada en Segunda B (apenas 9 partidos ha jugado el filial Atlético, que es colista de su grupo contra todo pronóstico), Sanabria ha jugado "como interior izquierdo, en un centro del campo con tres (un sistema de 4-3-3)", según subrayó el propio jugador. Eso sí, enseguida dejó claro que también ha desempeñado el papel "de doble pivote" de manera habitual en otros momentos de su carrera. 

Esta es la primera toma de contacto con el zaragocismo de Juanma Sanabria, internacional uruguayo en todas las categorías base de la celeste. Un emergente futbolista sudamericano que, según Torrecilla, "viene de estar en dinámica de primer equipo con el Atlético de Madrid, entrenando con Simeone con normalidad". El nuevo dorsal 28 del Real Zaragoza (se le da ficha del filial "por estrategia", según el director deportivo) sabe que puede estar en un momento clave de su progresión en el fútbol español. "Cuando me llamaron, decidí muy rápido que venía a Zaragoza. Tenía muchas ganas de pegar el salto ya a una liga profesional. Yo vengo aquí a sumar, a ayudar al equipo. Y el Real Zaragoza, a mí, me va a ayudar mucho personalmente", admite Sanabria.