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Daniel Osanz finaliza séptimo en su regreso a Estados Unidos
El jaqués no pudo volver a subir al podio tras la segunda posición lograda el año pasado en la Pikes Peak.
Daniel Osanz no pudo repetir la medalla de plata que se había colgado el año pasado en el que era su estreno en la Pikes Peak, una de las pruebas más prestigiosas de Estados Unidos que además forma parte del circuito mundial de las Golden Trail Series. El jaqués marcó un tiempo inferior al de 2022 y finalizó séptimo en una cita de mucho nivel en la que el ganador volvió a ser el suizo Rémi Bonnet, que con un registro de 2h 00:20 rebajó el récord que desde hacía treinta años ostentaba Matt Carpenter (2h 01:06).
Osanz cruzó la meta en 2h 12:34 cuando hace un año lo había hecho en 2h 08:42. Al podio, además de Bonnet, subieron el keniano Patrick Kipngeno (2h 04:09) y el estadounidense Eli Hemming (2h 07:40). En la categoría femenina, la victoria fue para la corredora local Sophia Laukli (2h 35:54), a la que siguieron la suiza Judith Wyder (2h 39:35) y la también estadounidense Anna Gibson (2h 43:49). La mejor española fue Malen Osa, que con un 2h 47:23 fue cuarta.
El reto al que se enfrentó Osanz consistió en un trazado de 21 kilómetros en los que tuvo que salvar 2.382 metros de desnivel positivo. Parte de Manitou Springs, en Colorado, y sube hasta el pico Pikes, a 4.302 metros de altitud. Ya antes de partir había remarcado que “por encima de los 4.000 metros cuesta moverse un poquito más”.
Antes de en la Pikes Peak, Osanz ya había tomado este curso la salida en dos pruebas de las Golden Trail Series, en la Zegama-Aizkorri, en la que fue el 51 dentro de lo que calificó como “un día duro”, y en la Maratón de Mont Blanc, en la que fue undécimo en un “día genial”. Entre otros resultados, este año fue sexto, mejor europeo, en el Mundial de subida vertical. Acostumbrado a brillar en las pruebas más explosivas, viene realizando desde hace un tiempo la transición hacia carreras de mayor distancia.
