El servicio Bizi de Zaragoza, prorrogado a la espera de fondos de la UE para su renovación

El Gobierno de Zaragoza ha aprobado este viernes su extensión hasta, como máximo, el 31 de octubre de 2024.

Estación Bizi situada frente a la facultad de Económicas, en la Gran Vía
Estación Bizi situada frente a la facultad de Económicas, en la Gran Vía
Francisco Jiménez

El Gobierno de Zaragoza ha aprobado este viernes la prórroga del actual servicio Bizi, gestionado por la empresa Clear Channel, hasta, como máximo, el 31 de octubre de 2024. 

El contrato actual termina el próximo 24 de agosto, de ahí la decisión, que la concejala de Movilidad y Servicios Públicos, Natalia Chueca, ha justificado “por los efectos favorables del sistema” a la movilidad y el medioambiente y por su demanda de usos, lo que ha llevado a declararlo “de interés público”.

El Consistorio ha solicitado 6,5 millones de euros a la Unión Europea para ampliar a 218 las 130 estaciones actuales, pasando también de 1.300 a 2.180 bicicletas eléctricas. No obstante, todavía se está a la espera de que se resuelva la convocatoria, dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Si todo se desarrolla según lo previsto y se consiguen los fondos, el Ayuntamiento prevé adjudicar el nuevo contrato “a mediados de 2024” e iniciar su puesta en marcha, como tarde, en el mes de agosto. La intención es “solapar” el Bizi actual con el nuevo contrato para garantizar al continuidad del servicio y evitar afecciones a los usuarios.

Según las estadísticas oficiales, solo en 2022, el servicio perdió un total de 1.130 abonados, pasando de 13.945 a 12.815, aunque se mantuvo por encima del millón de desplazamientos. La propia concejala de Movilidad admite que se ha quedado "obsoleto" y que desde 2017 las cifras han caído "en picado" eclipsadas por el auge de bicis, motos y patinetes eléctricos, de ahí que se esté trabajando en su renovación.

En 2019, antes de que estallase la crisis sanitaria, se registraban 1,5 millones de desplazamientos, pero la pandemia supuso un auténtico punto de inflexión. Lejos quedan los registros de 2012, cuando se alcanzaron los 38.887 abonados y se superaron los tres millones de usos. Desde entonces, el descenso ha ido acentuándose, encontrándose actualmente por debajo de los 15.458 usuarios existentes al cierre de 2008, el año de su inauguración.

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