semana santa

Las Siete Palabras redobla en una luminosa mañana de Viernes Santo

A las 12.00 ha salido esta procesión, la única de la mañana del Viernes Santo en Zaragoza, desde la iglesia de Santa Isabel de Portugal.

Las Siete Palabras aprovecha la radiante mañana de Viernes Santo para procesionar por el corazón de Zaragoza.
Las Siete Palabras aprovecha la radiante mañana de Viernes Santo para procesionar por el corazón de Zaragoza.
M. Millán

A la vez que Calanda ha retumbado al son de sus bombos y tambores, en Zaragoza ha comenzado una de las procesiones más tradicionales de su Semana Santa. La cofradía de las Siete Palabras y de San Juan Evangelista ha salido de Santa Isabel de Portugal fiel a su cita y el verde de sus capirotes ha dado el color a una mañana de luz en la que no ha faltado su mítica 'Palillera'.

Han caminado por las calles del Casco Histórico de la ciudad para predicar las últimas palabras de que pronunció Cristo antes de morir, en las que también se ha hecho mención a la guerra de Ucrania. Los redobles y mazazos han acompañado a los cuatro pasos de la cofradía. Sus dimensiones son tales que no caben por el dintel de San Cayetano y, una vez en el exterior, han elevado las cruces para darles altura gracias a un sistema de poleas.

Procesión de las Siete Palabras
Procesión de las Siete Palabras
M. Millán

El paso de la Tercera Palabra es obra de Félix Burriel. Cristo, en el centro, aparece crucificado y flanqueado por San Juan Evangelista y la Virgen María. Desde el 26 de marzo de 1948, día que se estrenó, procesiona por las calles de Zaragoza. Este paso, que cumple 75 años y es el más antiguo en propiedad de una cofradía, traslada a las fotografías en blanco y negro que se conservan.

A la plaza del Justicia también ha salido la Quinta Palabra, de Francisco Liza. Tallado a finales del siglo XX, la curiosidad de este paso se esconde bajo las faldas donde un hermano lo conduce sin necesidad de que sea empujado. A estos se suma el Cristo de las Siete Palabras, una peana de 2001 que es el protagonista del viacrucis del Lunes Santo desde San Gil.

Y, por último, el ya llamado popularmente "Cristo de Miñarro", en honor a su escultor, Juan Manuel Miñarro. El Cristo de la Expiración en el Misterio de la Séptima Palabra –como se llama en realidad- es una de las incorporaciones más recientes del patrimonio de la Semana Santa zaragozana (de 2014). Refleja un extremado realismo, de hecho, hasta en las rodillas lleva arena de Tierra Santa. Es portado por 50 hermanos que cambian su capirote verde por el tercerol negro. Los Ministriles de Zaragoza han acompañado con sus instrumentos a este Cristo, que se puede venerar durante todo el año en la basílica del Pilar. Precisamente, a su paso por la plaza del Pilar, una masa de gente se agolpaba para ver la procesión. 

"Tenemos mucha ilusión y ganas después de dos años sin procesionar"

El último Viernes Santo que se celebró esta procesión fue en 2019, cuando el cielo encapotado respetó y la lluvia no hizo acto de presencia. En 2020 se vivió en casa a causa de la pandemia de covid-19 y 2021 en las iglesias. "Tenemos mucha ilusión y ganas después de dos años sin procesionar", confesó su hermano mayor, Juan Luis Peña, este jueves en la parte trasera de San Cayetano mientras ultimaba junto a otros cofrades todo para esta procesión.

Así fue la última procesión de las Siete Palabras, en 2019

La lluvia no ha interrumpido el recorrido de esta procesión, que sirve de prólogo al Santo Entierro.

Fue esta cofradía la que en 1940 introdujo el sonido del tambor y el bombo a la Pasión zaragozana. Las Siete Palabras fue fundada por Mosén Francisco Izquierdo Molins y en la actualidad cuenta con más de mil miembros, siendo de las más numerosas de la ciudad.

La procesión ha llega hasta la plaza de España, tras procesionar por Alfonso I, la plaza del Pilar y Don Jaime. Han regresado a San Cayetano, donde ya está todo preparado para que comience el Santo Entierro.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión