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"Me he centrado en la arquitectura porque ahora es más complicado vivir de la moda"
El modelo Jorge Zumeta ha creado un estudio en Zaragoza ante la dificultad por la que atraviesa el sector por la covid. "Hay menos trabajos y están menos remunerados", señala la también modelo Amaia Tabuenca.
Aprovechar el tiempo. Así resume Jorge Zumeta, el modelo aragonés con más proyección nacional e internacional en estos momentos, el punto de inflexión dado a inicios de la pandemia, en marzo: dejar Barcelona -donde residía- para instalarse en Zaragoza y montar un estudio de arquitectura junto a una compañera de carrera. Eso sí, avisa, su idea es compaginar los dos trabajos e ir adaptándose a las circunstancias.
Este joven de 29 años -que empezó en el mundo de la moda hace 14 años de la mano de la agencia Globe en la capital aragonesa- destaca que el sector está "muy afectado" por el coronavirus. "Sigue habiendo trabajo fuera, pero es más complicado. Costará volver a lo que había antes, que ya había bajado con la crisis anterior. Espero que no se aproveche para recortar salarios, que es lo que suele pasar", dice.
La expansión del virus a nivel global ha dificultado el trabajo de los modelos -habituados a coger aviones un día sí y otro también- y los desfiles se han convertido en presentaciones virtuales, como las de estos días en Nueva York, en Estados Unidos, durante la Semana de la Moda.
Zumeta es uno de ellos. Su facturación internacional representa el 90% de sus ingresos y ha trabajado por toda Europa, Turquía y Sudamérica, entre otros lugares. Como mínimo siempre ha tenido trabajo una vez al mes y era habitual que clientes fijos le llamaran todos los meses. Hasta que llegó el virus. En casi un año de crisis sanitaria solo ha tenido tres trabajos para Cortefiel en Madrid. "Para un modelo es complicado tener esa regularidad que yo tenía. Me he centrado en la arquitectura porque ahora es más complicado vivir de la moda. Es difícil viajar y los clientes tienen menos facturación y, por lo tanto, bajan el nivel de las campañas", indica para explicar el salto que ha dado.
"Soy un culo inquieto"
Ahora bien, mientras elabora proyectos de arquitectura también está pendiente de próximos trabajos como modelo. De hecho, estos días espera una llamada de su representante para poder viajar en breve a Chile. "A ver si tengo disponibilidad y encaja. Sería para una semana. Soy un culo inquieto. Ahora estoy con la moda más parado, pero no la suelto. Estaré encantado de seguir como antes siempre que la situación mejore, haya libertad para viajar y los clientes vuelvan a conseguir el flujo de trabajo que había", subraya.
Por su parte, la modelo Amaia Tabuenca -natural de Borja y que también empezó en Globe en Zaragoza- lleva un año afincada en Madrid, donde compagina el mundo de la moda con la carrera de Periodismo en la Universidad Complutense. Desde este verano trabaja con View Management (que cuenta entre sus modelos con Jon Kortajarena), aunque sigue colaborando puntualmente con la agencia zaragozana, al igual que Zumeta. "En Aragón hay muy buenas oportunidades: como la Aragón Fashion Week", comenta esta joven de 19 años, que ha desfilado para Roberto Verino, Ágatha Ruiz de la Prada y María Escoté, entre otros diseñadores.
Durante estos meses de pandemia, Amaia ha hecho sobre todo catálogos en Madrid, Barcelona y Valencia y el último desfile en el que participó fue el pasado septiembre en la pasarela Aguja Goyesca, que tuvo lugar en el Auditorio de Zaragoza. "En Madrid soy modelo de fotografía (sobre todo para catálogos) por la altura y en Zaragoza trabajo en pasarela. El coronavirus se nota mucho, hay menos trabajos y están menos remunerados. Además, puede que salgan trabajos pero a veces se caen porque alguien da positivo en los test y se cancelan. Eso le ha pasado a un compañero mío", explica la joven, que recuerda que los modelos están sin mascarilla durante las sesiones junto al resto del equipo, que sí las llevan.
No obstante, esta aragonesa reconoce que empieza a haber más actividad. De hecho, a ella le llega trabajo todas las semanas. "El próximo viernes tengo más catálogos y voy a posar como modelo para un máster de fotografía; no es lo más común pero está bien pagado", detalla Amaia, quien apunta que los 'casting' son ahora 'online'. "En lugar de ser presenciales, se envía el 'book' y corres menos peligro", añade.
Mientras, en la Agencia Globe de Zaragoza continúan con la formación de modelos en tiempo de pandemia. Eso sí, el aforo está reducido al 30% por medidas sanitarias y de 20 personas por grupo se ha bajado a siete. "También hemos pasado de cuatro meses y medio de formación a tres; hemos visto que era suficiente. Aprenden de todo: pasarela, posado fotográfico, protocolo de moda, maquillaje, estilismo...", indica Gloria Laguarda, su directora.
Demanda de las empresas
Con una amplia cartera de modelos (de todas las edades) y de clientes, Globe está especializada en eventos de moda (principalmente desfiles) -que son el 20% del negocio- y en publicidad comercial (webs, catálogos, vídeos corporativos para empresas, redes sociales...) -el otro 80%-. En un principio, Laguarda pensaba que con la irrupción del virus la situación iba a ser "desastrosa" al eliminarse el 100% de los eventos de moda (el único que hicieron en 2020 fue el de la Aguja Goyesca), pero para su sorpresa han crecido por el lado digital.
"Las empresas con las que trabajabamos antes de la covid nos contratan más porque tienen que actualizar sus webs, salir en redes... Y hay cantidad de nuevas compañías que necesitan darse a conocer. Nos piden bastante a menudo producciones. Toda empresa necesita un escaparate 'online'; si no tocan esa parte están muertas. Y nosotros vamos a estar como unos proveedores más", sostiene Laguarda.
En cuanto al futuro de los desfiles, la directora de Globe considera que lo puramente 'online' no funciona. "Es mucho gasto. Serán más elitistas: un híbrido entre lo presencial (para la gente vip, autoridades y patrocinadores) y lo digital. El gran público tendrá presencia vía 'streaming' u otros medios", avanza. Una tendencia a la que, a su juicio, se sumará la moda sostenible. "Si antes estaba empujando, ahora no hay otra. Se va tomar más conciencia", asegura.
