Pioneras en San Lorenzo: "A las mujeres nos daban la concejalía de Fiestas o de Cultura"

La primera concejala de Fiestas, la primera presidenta de una peña, la primera mujer que mandó en la plaza de toros... Ellas han marcado el camino que este año culmina con la incorporación de dos féminas a la Agrupación de Danzantes.

De izquierda a derecha Ana Marquina, Rosa Casals y Palmira Ramón.
De izquierda a derecha Ana Marquina, Rosa Casals y Palmira Ramón.
Veóonica Lacasa/Javier Navarro

Dos nombres, el de Ibón Cejalvo y Cristina Esperanza, pasarán a la historia de las fiestas de Huesca por ser las primeras en entrar en la Agrupación de Danzantes. Con ellas, la mujer cobra un especial protagonismo este San Lorenzo, lo mismo que con Ana Porta, autora del cartel; África Moyano, priora de San Lorenzo; o Gloria Ruiz, presidenta de la Peña Taurina. Los actos los presidirá una alcaldesa, Lorena Orduna, y detrás de la organización estará la concejala de Fiestas, Nuria Mur. Pero antes hubo otras pioneras que abrieron camino en el Ayuntamiento, las peñas o los sectores económicos de la ciudad, y siguen siendo muchas las que contribuyen año tras año a hacer más grande la semana del 9 al 15 de agosto.

Palmira Ramón tiene el honor de haber sido la primera concejala de Fiestas de Huesca. En los 40 años de ayuntamientos democráticos han dirigido el timón de este barco María Pilar Goded, Maribel Abril, Urbita Cebollero, Teresa Sas, Gema Allué, María Rodrigo y ahora Nuria Mur. En la lista hay más nombres femeninos que masculinos: Luis Acín, Manolo Lozano, Pepe Escribe, Andrés Puyuelo o Ramón Lasaosa.

Palmira Ramón rememora una época en la que para la organización contaba con un grupo de voluntarios y en la que se estrenó la plaza de toros como espacio de actuaciones. Era el primer mandato democrático (1979-1983), con José Antonio Llanas Almudévar de alcalde. Recuerda con orgullo el momento de prender la mecha del cohete anunciador, porque en aquella época lo tiraban los concejales.

Ella iba en una lista independiente y duró un año en el área de Fiestas. "Tuve muchos problemas con Llanas. El Ayuntamiento no disponía ni de un escenario ni de sillas. El presupuesto de las fiestas era lo que sacabas de la plaza de toros y del alquiler del Jardín de Verano. Conseguimos superávit y queríamos utilizarlo para comprar el escenario y las sillas, pero no nos lo permitió. Dijo que lo que se ganaba un año, por lo que se perdía otro".

Pero hubo más motivos. El cartel, diseñado por el artista Enrique Torrijos, fue censurado. "No les gustó porque salía el clero", cuenta Palmira Ramón, que exigía mayor autonomía para la comisión de Fiestas. Mostraba, reunidos en una misma fotografía, a un torero, una jotera, un peñista, un cura y un músico, elementos icónicos de San Lorenzo. No les pareció adecuado y el alcalde mandó improvisar otro con una fotografía de los Danzantes y la catedral. En 1983, los socialistas recuperaron el de Torrijos.

Pese a todo, Ramón guarda un buen recuerdo de su corta etapa, marcada por la cordialidad con las peñas y las ganas que se ponía a todo. "Buscamos calesas para llevar a las mairalesas a los toros, las conseguimos y las restauramos". También rememora a la Banda de Música recién formada, "antes venía la de Buñol". "En esencia las fiestas no han cambiado", concluye. Sobre su condición de mujer, asegura, "nunca ha sentido que tuviera que esmerarme más ni que nadie cuestionara mi autoridad".

De los iniciales mandatos socialistas salió otra concejala, Urbita Cebollero, quien sucedió al recordado Pepe Escriche entre los años 1991 y 1995. "A nadie se le ocurría darnos las concejalías de Urbanismo, Hacienda o Personal... Mandábamos en Fiestas, Cultura y Servicios Sociales", declara. Tiene un buen recuerdo de aquellos años. La concejalía le venía como anillo al dedo, "porque con poco más de 30 años, tenía muchas ganas de fiesta".

Las peñas se crearon en los años 50, y no fue hasta 1991 cuando se eligió a la primera presidenta. El honor le correspondió a Ana Marquina, quien se puso al frente de la Zoiti. "En las reuniones de peñas casi todo eran chicos", recuerda. En aquellos tiempos la suya, fundada en 1956, tenía 3.800 socios, muy por encima de las cifras actuales.

"Competí con otro candidato, pero no se hizo pensando en poner a la primera mujer", asegura. Tampoco oculta que a un sector "no le hacía mucha gracia". "En la junta éramos tres chicas que luchaban en un mundo de hombres pero que convencimos y nos hicimos respetar", cuenta Ana Marquina. Las ‘leonas’ de la Zoiti las llamaban.

Otro de los protagonistas de San Lorenzo 2023 también tiene nombre de mujer. Rosa Casals será la homenajeada en la Fiesta del Comercio del 11 de agosto. También ella fue una pionera en su sector. Su tienda de decoración era un sitio de referencia, al frente del cual permaneció 32 años hasta su jubilación a finales del 2022. "El pequeño comercio es un sector muy femenino, y si hay hombres al frente como propietarios, la mayoría de las empleadas son mujeres", dice.

Sobre su contribución, se enorgullece de haber sido pionera en la modernización del pequeño comercio, en aplicar un concepto diferente, "de puertas para adentro y de puertas para afuera", en la castiza calle de la Correría, "la más bonita de Huesca". "Ahora ya hay más zonas peatonales, pero entonces venía de propio a ver nuestra calle. Tuve una idea hace muchísimos años que fue sacar el comercio a la calle, me constó convencer a la gente, y a raíz de entonces lo empezó a hacer la asociación", explica satisfecha de esa labor.

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