Semáforos con Chiquito y Mortadelo: igual de efectivos pero más divertidos
El Ayuntamiento de Barcelona rendirá homenaje en un cruce de la capital a los personajes de Ibáñez. Zaragoza fue pionera en poner falda al rojo, verde y ámbar.
Barcelona contará con un semáforo con las figuras de los populares personajes de cómic Mortadelo y Filemón, en homenaje a su creador, Francisco Ibáñez, fallecido el 15 de julio. Fue una iniciativa popular que el Consistorio de Collboni ha aceptado de buen grado y, según informan, los servicios de Movilidad ya "estudian posibles ubicaciones". La más probable, la de la calle de la biblioteca García Márquez, donde el historietista tiene un espacio dedicado a su legado.
Este singular homenaje no es el primero (ni será el último) que se hace mediante un semáforo en España. En Málaga se ha convertido en todo un reclamo turístico la señal luminosa con la que la ciudad recuerda a Chiquito de la Calzada y no son pocos los visitantes que se hacen fotos con la silueta del humorista y, también, graban los sonidos del semáforo, pues se escucha “Quiétorrr”, cuando está en rojo, y “Al atáquerrr”, cuando el peatón puede cruzar sin problemas de tráfico.
En Aragón, de momento, no se han llevado a cabo iniciativas similares, pero la Comunidad sí tiene una relación de amor-odio con los semáforos. Por un lado, siempre se ha dicho que Zaragoza es una de las ciudades de España con más cruces regulados, si bien la estadística señala que Valencia, en lo referente a número de habitantes, cuenta aún con más semáforos. En Zaragoza hay unos 16.000 elementos de este tipo, y la queja más común es que son redundantes con las rotondas y que su sincronización deja mucho que desear, sobre todo, en la margen izquierda.
No obstante, la capital del Ebro fue pionera en lo que a variar las figuritas de los semáforos se refiere, pues en 2010 llegaron por primera vez las siluetas de peatones con falda en sus calles. En realidad, fue consecuencia de un error en el encargo, pues los semáforos los había encargado el Ayuntamiento de Sagunto pero recalaron en Zaragoza. Durante unos meses el Consistorio optó por no encender la faldas (decían que suponía un ahorro por las lucecitas leds) y siguió apostando por la imagen tradicional. Tras varios encendidos debates en el salón de pleno sobre “feminizar los semáforos”, se logró que se hiciera visible la falda, acaso, azuzados también por una lona en Nueva York en la que aparecían distintas siluetas de semáforos del mundo y, entre ellas, la de ‘Saragossa’ con falda.
Quizá la más famosa e icónica figurilla de semáforo de la historia sea la del ‘Ampelmann’, que regulaba el tráfico en los pasos de peatones de la extinta República Democrática Alemana. Quienes haya visitado Berlín habrán encontrado en las tiendas de recuerdos gorras, camisetas, llaveros, gominolas y todo tipo de mercadotecnia de un hombrecillo que pone los brazos en cruz para prohibir el paso y da un paso adelante cuando se pone en verde.
El ‘Ampelmann’ se diseñó en los años 60 pero no fue hasta la reunificación alemana (1991) cuando se convirtió en un símbolo, reivindicado y nostálgico, que aún persiste en el entorno de la puerta de Brandemburgo. En otras ciudades las siluetas también varían y, así, en Nueva York los hombrecillos aparecen recortados por una línea de puntos, en Bangkok parece que bailan ‘breakdance’ y en la ciudad danesa de Aarhus son vikingos los que se iluminan en las señales de tráfico.
En casos muy determinados
En España siempre se ha apostado por la sobriedad y cuando se autoriza poner un semáforo especial y algo grotesco se hace sólo en un paso de cebra o en un barrio concreto. También los ha habido ‘efímeros’ como los semáforos con guitarristas en las ferias andaluzas o las figuras falleras que alguna vez se han probado en Valencia. Los responsables de Movilidad explican que lo esencial es que la figura de arriba sea roja y la de abajo verde (da igual un círculo que un alienígena), y que tengan buena visibilidad. Desde la DGT sí recomiendan que tengan un indicador de cuenta atrás y que existan senderos táctiles (bordillos a ras de suelo) en su entorno.
Si de singularidades semafóricas se trata, es preciso mentar también que en Aragón está la localidad más pequeña del mundo que cuenta con un semáforo (Purujosa, con una decena de habitantes pero uno de estos postes) y que también en nuestro territorio se ubica, en Garrapinillos concretamente, una compañía innovadora dedicada al diseño y la fabricación de estos elementos. Renovalite Trafic hace ya un lustro que despachó unos semáforos solicitados por el Ayuntamiento de San Fernando (Cádiz) en apoyo a la diversidad sexual: eran parejas del mismo sexo cogidas de la mano y con un corazón en la mitad para hacer ver que no se trataba de simples amigos…
