Verano
Fiebre por las piscinas en las casas en Aragón: se construye casi una por día en un año
Las empresas coinciden en que ha habido un aumento de la demanda de los vasos de agua, especialmente desde la pandemia.
Casi una por día. Las piscinas, tanto de obra como prefabricadas, son cada vez más demandadas en Aragón, especialmente las que se instalan en pequeñas terrazas o terrenos de viviendas. Según datos del Catastro, en la Comunidad, actualmente, hay 18.295 vasos de agua construidos al aire libre, 361 más con respecto a los que se contabilizaron el año pasado, cuando eran 17.934. Las empresas coinciden en que las peticiones se han disparado, especialmente tras la pandemia, ya que muchas personas han pasado de vivir en bloques de edificios a unifamiliares.
Con la construcción de una piscina, sea de uso municipal o privado, debe registrarse en la Dirección General del Catastro. En esta institución se contabilizan todos los vasos de agua en la Comunidad. En Aragón, destaca Zaragoza, con 12.197 vasos de agua, seguido de Huesca, con 3.735, y de Teruel, con 2.363. La capital aragonesa es la que concentra más instalaciones de este tipo, donde sobresale el municipio de Cadrete, con 566 piscinas. A estos datos habría que sumarle las piscinas cubiertas, que son 8.141 instalaciones.
La empresa zaragozana Novosat Pool es testigo del aumento de la demanda de construcción de piscinas. Julio Yuste, uno de los socios, dice que ha habido "un incremento" desde la pandemia. "Había mucha gente que pasó de vivir en una vivienda de interior a una de exterior o unifamiliar. Querían un espacio más privado y alejado. Por eso tuvimos bastante más trabajo del habitual", dice. Ahora, este crecimiento "ya se está normalizando". "La curva ha bajado un poquito, sobre todo con el encarecimiento de los precios de la mano de obra y los materiales", asegura Yuste.
Varias personas optan por la instalación de piscinas prefabricadas de fibra. Yuste cifra su precio en unos 14.000 o 16.000 euros, siendo la opción más económica. "En lo que hemos detectado un especial incremento es en las piscinas de obra, con sistemas de cloración salina con equipos autonómicos. Es de un nivel adquisitivo más alto", desarrolla. En este caso, el coste partiría de unos 28.000 euros con los sistemas más simples, pero que estéticamente guste y tenga revestimientos y lo más básico. Además, este tipo de instalaciones revalorizan el valor de la vivienda.
En los despachos de arquitectos no han notado una demanda especialmente creciente, si bien la mitad de los clientes contempla tener piscina, según explica David Martínez, de Tangram Arquitectura. "Si hay que recortar costes se deja la inversión de la piscina para más adelante. Se suele pedir, pero no es de forma unánime. Por ejemplo, nuestros dos últimos proyectos van sin, pero los dos anteriores eran con", añade.
La demanda depende, sobre todo, de la zona. La mayoría de proyectos se concentran en la ciudad o alrededores, por lo que es más complicado ya que no hay tanto terreno disponible. "Si la vivienda está en Montecanal, por ejemplo, la edificabilidad y las parcelas son más justas y ahí no se contempla tanto", dice. Sin embargo, en otros municipios como en San Mateo de Gállego o en Cadrete el estudio ha diseñado viviendas con piscinas espectaculares. "En Cadrete las parcelas son enormes, de 600 metros cuadrados", especifica Martínez. Si además la piscina municipal está lejos, es más probable que se instale uno de estos vasos de agua.
Respecto a los precios, incide en que depende "muchísimo" de los acabados, pero una prefabricada básica costaría unos 12.000 euros. "No suelen ser muy grandes. Hemos colocado de entre 15 y 30 metros cuadrados", desarrolla. Incluso, pueden llegar a cubrir vasos de agua que están al aire libre, como uno de los proyectos que tiene este estudio. "Tenía un vaso de piscina en desuso, y actualizamos la vivienda para que imitara a este espacio y la acristalamos para darle el uso todo el año. Se rentabiliza mucho", añade este arquitecto.
También cabe la posibilidad de instalar un vaso de agua en una parcela de pequeño tamaño, como es el caso de la Casa Mitmac, de DANA Arquitectos, en La Paz. "Se realiza un vaso de tan solo 8 m2 (4x2 m), en el espacio delimitado por los muros de contención que conforman el patio, pues este se halla excavado 3 metros por debajo de la calle. Lo más particular de la piscina es que su acabado final es un mortero con una pintura blanca impermeable que adquiere la misma apariencia que los muros del patio, de tal manera que parece que este continua por dentro de la piscina. Este acabado de color blanco genera un singular efecto en la coloración del agua que adquiere un bonito color azul turquesa", detallan. El resultado es muy llamativo.
Cuando hay más espacio, las opciones se multiplican. Como plantea este estudio de arquitectura, colocarlas tras un salón que tenga grandes ventanales favorece una vista al exterior "limpia". "Una imagen que eleva la categoría de la casa", añaden.
Piscinas en las terrazas
Como es lógico, la mayoría de estas instalaciones se hacen en barrios rurales o en municipios, donde proliferan las viviendas unifamiliares o los terrenos para acometer este tipo de operaciones. Y esto lo reflejan los datos del Catastro, ya que, por ejemplo, el municipio de Barbastro, en Huesca, tiene más piscinas al aire libre construidas (426) que la propia capital oscense (400). En Zaragoza también destacan Cuarte de Huerva, con 385; Calatayud, con 444; San Mateo de Gállego, con 399 y El Burgo de Ebro con 394. En Teruel, la mayoría de estas instalaciones se concentran en Alcañiz (701), más que en la capital turolense (692).
No obstante, también existe la opción de colocarlas dentro de casa, siempre teniendo precauciones. El Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Zaragoza (Coaatz) lanza todos los veranos un aviso con respecto a la instalación de vasos de agua en las terrazas, ya que se suele producir algún derrumbe de forjado por el excesivo peso al sobrecargar la estructura con la instalación de una piscina portátil.
En la actualidad, en los edificios en construcción, la capacidad de sobrecarga del forjado de la azotea o de una terraza suele ser de 200 kilos por metro cuadrado, valor que equivale a 20 centímetros de altura de agua. Por ello, desde este colegio trasladan varias recomendaciones sobre el uso de estas piscinas como: no llenar más de 20 centímetros de altura de agua si el edificio es de reciente construcción, mientras que para inmuebles más antiguos esta altura de agua será en todo caso igual o menor y dependerá de la antigüedad y el tipo del forjado.
Además, cabe resaltar que casi todas las promociones de obra nueva tienen una zona de piscina privada. Se ha convertido ya en un requisito casi indispensable. Por ejemplo, una de las últimas en terminar su construcción en la capital aragonesa y a la que los vecinos ya han entrado a vivir, Casanate -junto a la Estación Delicias-, cuenta con una zona común de piscina para disfrute de todos los que adquirieron una vivienda.
