Adiós a la mascarilla en el transporte: entre "por fin, qué alivio" y "por prudencia la seguiré llevando"

La opinión de los epidemiólogos está dividida entre los que apoyan la retirada el 8 de febrero porque la situación está «muy estable» y los que la ven «prematura».

Varios pasajeros esperan el tranvía, este jueves, en el paseo de la Independencia de Zaragoza con la mascarilla puesta
Varios pasajeros esperan el tranvía, este jueves, en el paseo de la Independencia de Zaragoza con la mascarilla puesta
Oliver Duch

Un paso más en el largo adiós a las mascarillas. Diez meses después de su retirada en interiores, a partir del 8 febrero ya se la podrá quitar quien quiera en el transporte público, pero deberá mantenerse en centros sanitarios, residencias y farmacias. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunciaba este jueves que el Consejo de Ministros aprobará el fin de su obligatoriedad en transportes públicos el 7 de febrero. Y aunque no detalló cuándo entrará en vigor, suele ser al día siguiente cuando se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Las opiniones están divididas tanto entre los expertos como entre los sectores afectados y a pie de calle. José Antono Paesa y Elena Peña, un matrimonio de jubilados, esperaban el autobús horas después de darse a conocer esta novedad en el Paseo de la Constitución de Zaragoza. Ven con buenos ojos la retirada de la obligatoriedad, pero, personalmente, seguirán utilizándola "por prudencia" cuando "el autobús o el tranvía vayan muy llenos de gente, no nos molesta". Lo que sí consideran un "contrasentido" es su uso en las farmacias, "un establecimiento como otro cualquiera y en el que coinciden menos clientes que en un bar o un restaurante, por ejemplo".

En la misma parada, Mónica Pueyo, de 17 años, explicaba que "probablemente me la quitaré" aunque "ya me he acostumbrado a llevar siempre dos, una en el bolso y otra en un bolsillo, me va a parecer hasta extraño no tenerlas a mano". Ya en el paseo de la Independencia, Óscar Gracia y Jesús Nivela, soltaban un "por fin, qué alivio" cuando se les preguntaba su opinión. "La situación está mucho mejor que hace un año y hay muchas personas con la vacuna. Además, cada uno puede decir seguir con ella si tiene cerca a familiares o amigos de riesgo o tiene síntomas y se siente más tranquilo con ella", explicaban.

Juan José Badiola: "Es muy prematura, no entiendo estas prisas"

Quien no comparte esta medida de ninguna manera es el investigador y director del Centro de Encefalopatías de la Universidad de Zaragoza, Juan José Badiola. Considera que es "muy prematura" y asegura que no entiende "el porqué de estas prisas, no sé si hay alguna razón sociopolítica, pero sanitaria no la veo".

A su parecer se debería haber esperado al final del invierno. Recuerda que estos primeros meses del año son una etapa "proclive y favorable a la circulación de patógenos respiratorios", que todavía se desconoce el impacto "de la explosión de casos en China y de la variante kraken" y que "la cobertura de vacunación de la cuarta dosis no es tan alta en todos los grupos de edad como debiera".

Más moderado se muestra el epidemiólogo Nacho de Blas, aunque coincide en que se elimina "algo pronto" y hubiera sido "más prudente" esperar hasta después de Semana Santa. Además, lanza un mensaje para que el uso de cubrebocas a partir de ahora "no se convierta en un estigma para nadie y se vea como algo habitual". Reconoce que era una iniciativa "más o menos previsible porque España es el único país que lo mantiene junto a Grecia y algunos sitios de Alemania".

La Sociedad Española de Epidemiología cree que continuar con la obligatoriedad de la mascarilla en el transporte público "no tiene sentido" y, de hecho, se podía haber quitado hace meses, según manifestaciones de su presidente, Óscar Zurriaga, recogidas por la agencia EFE. Al mismo tiempo insiste en que las personas vulnerables o con síntomas de cualquier infección respiratoria la utilicen.

Presidente de los taxistas: "Nos evitaremos algunos problemas"

En el mundo del taxi tampoco hay "una postura unánime", según el presidente de la Asociación Provincial de Autotaxi (Apatz), Miguel Ángel Perdiguero. "Hay compañeros que ven muy bien la retirada, pero otros van a seguir llevándola bien por ellos o porque conviven con personas de riesgo o mayores y no quieren llevarse a casa ningún bicho", comenta.

Personalmente cree que la no obligatoriedad de la protección facial les va a "evitar algunos problemas" y "enfrentamientos" que se vienen produciendo, principalmente por las noches, con pasajeros que no la llevan y se niegan a ponérsela aunque les faciliten una.

Guillermo Ríos (Avanza Zaragoza): "Viene a normalizar la situación"

Para el director de Avanza Zaragoza (concesionaria de los autobuses urbanos de la capital aragonesa), Guillermo Ríos, se trata de una "buena noticia", que se podría haber tomado "hace tiempo" y que viene "a normalizar la situación del transporte" como el resto de actividades. Cree que su mantenimiento "ha estigmatizado" al sector y que a partir de ahora ayudará a recuperar más pasajeros.

Este adiós llega en un momento en que tanto la incidencia de la covid como la de la gripe se encuentran a la baja. Según los últimos datos, entre el 16 y el 22 de enero se diagnosticaron en Aragón 110 casos de coronavirus frente a los 175 de la semana anterior. Aunque no se ha registrado ningún brote en centros residenciales, sí se han notificado tres fallecimientos. Respecto a la gripe, la incidencia sigue por debajo del umbral de epidemia y se han producido 103 urgencias por esta enfermedad y 20 hospitalizaciones.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión