Aragón solicitará al Ministerio 30.000 dosis contra la covid para garantizar ‘stock’ suficiente
El interés por la vacunación ha repuntado y se han programado hasta 26.173 citas para dos semanas. La Comisión de Salud Pública apela a completar la inmunización, especialmente entre personas vulnerables.
Aragón tiene previsto solicitar al Ministerio de Sanidad unas 30.000 dosis de la vacuna de Pfizer de adulto en las próximas semanas, una cantidad que se ha estimado en función del consumo y del ‘stock’ actual, que ronda los 5.110 viales (30.660 dosis) y que se conservan en el servicio de Farmacia del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Allí se guardan también viales pediátricos y, por el momento, no se van a reponer más porque las existencias son adecuadas para la demanda que existe.
El interés por recibir la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus ha repuntado. En opinión de Begoña Adiego, jefa de servicio de Prevención y Promoción de la Salud, podría influir el "efecto llamada de China", ante la explosión de contagios en el país asiático, u otros factores, como el hecho de que haya personas que prefirieron esperar a que pasaran las fiestas navideñas ante el temor de posibles reacciones adversas. Fuentes de la Consejería de Sanidad informaron el miércoles que se habían programado hasta 26.173 citas para los próximos 14 días, tres veces más que hace menos de un mes.
Este aumento del ritmo de vacunación hace necesario también hacer acopio de mayor número de viales. La solicitud de más vacunas al Ministerio se materializa ante un incremento de la demanda pero, sobre todo, según explicó Adiego, por contar con un ‘stock’ suficiente para seguir teniendo existencias en Aragón.
La Comisión de Salud Pública, integrada por el Ministerio y las comunidades, hizo este jueves un seguimiento de la evolución de la covid, tras el incremento de los casos en China. Apostó por potenciar la secuenciación para detectar precozmente la aparición de nuevas variantes y por fomentar la campaña de vacunación de segundas dosis de recuerdo adaptadas a variantes, especialmente a las personas más vulnerables.
En Aragón, el servicio de Farmacia del Clínico sigue siendo el centro de recepción de todas las vacunas destinadas a covid-19, aunque el proceso ha ido evolucionando desde que se puso en marcha, en diciembre de 2020. En los momentos más intensos de la campaña se llegaron a dispensar más de 10.000 viales a la semana; el pasado diciembre hubo semanas que se distribuyeron en torno a un 5% o menos de esa cantidad. "El ritmo de recepción de vacunas que estamos teniendo en los últimos meses no tiene nada que ver con lo que fue al inicio de la pandemia, que era todas las semanas. Ahora recibimos muy esporádicamente, y siempre a petición de la propia comunidad autónoma, que intenta ajustar la petición al consumo y a las previsiones", resumió Tránsito Salvador, jefa de servicio de Farmacia del Hospital Clínico. "Es decir -señaló-, si el ritmo de vacunación se incrementa y el ‘stock’ que tenemos puede quedarse corto o muy ajustado los profesionales del grupo de valoración técnica de Salud Pública y del Salud de la Comunidad estiman las previsiones para solicitar más. En Aragón se ha incrementado estas últimas semanas ligeramente la vacunación y, ante esa situación, lo más prudente es solicitar más viales, aunque seguimos teniendo miles de vacunas almacenadas en los ultracongeladores".
Ahora solo reciben vacunas de Pfizer, tanto de adulto como pediátricas; mientras que antes se llegaron a tener hasta cinco fármacos diferentes, incluyendo Moderna, Janssen, Astra Zeneca y Novavax. Los viales de Pfizer se siguen conservando en ultracongeladores a -80 grados: "Al tener solo Pfizer, es mucho más fácil la manipulación y la dispensación que antes cuando teníamos cinco". Y también se ha flexibilizado la temperatura de conservación de este fármaco: una vez que se saca del ultracongelador se guarda en la nevera entre 2 y 8 grados centígrados, y el tiempo de conservación se ha alargado a diez semanas. Por ello, "su manejo en los centros de salud también es más fácil, la caducidad se ha alargado un poco más y por lo tanto la vida útil de la vacuna, también". Según puso de manifiesto Tránsito Salvador: "Además, la manipulación en Farmacia es más sencilla, ya que tras sacar las vacunas del ultracongelador, al tener un mayor conocimiento y mejor manejo de los tiempos en cada fase de conservación de la vacuna, la preparación para la dispensación a los centros de salud es más tranquila".
Complejo engranaje
Desde Salud Pública siguen haciendo la programación de los centros a los que distribuir los viales. "La dispensación viene siendo igual que siempre" pero, al disminuir el ritmo de vacunación, el número de unidades que se distribuyen también bajó, lo que ha reducido el número de rutas de distribución por la empresa logística. "No es necesario enviar vacunas todas las semanas. Cuando se hacía con esa periodicidad exigía una labor de preparación mucho más intensa", recordó.
En este proceso, relató la jefa de servicio de Farmacia, participan muchos actores. Salud Pública y los Servicios Centrales del Salud elaboran un listado de trabajo con las vacunas que necesita cada centro, la ruta, la hora de recogida y a la que debe llegar al destino, el responsable que las recibe... "Todo tiene que estar en perfecta sintonía para que no haya ninguna disrupción en el circuito", dijo.
