Sanidad ampliará previsiblemente la próxima semana el horario de cierre del ocio nocturno hasta las 3.00, una flexibilización que incluirá nuevos alivios para la hostelería y que se concretará en una nueva orden. También contempla ampliar aforos como siguiente paso en la desescalada de pubs y discotecas, quedando en último lugar el consumo en barra y el uso de las pistas de baile. El propio director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, ha asegurado esta semana a varios empresarios que el Departamento tiene la "clara voluntad" de seguir este camino si los contagios por covid se mantienen a raya.

La Consejería no esperará a que Aragón baje a nivel 1, para lo que tendría que reducir su incidencia a 25 casos por cada 100.000 habitantes a siete días o a 50 a dos semanas, sino que, tras el "arranque modesto" que ha supuesto permitir que se reanude la actividad, apostará por una flexibilización gradual; una modulación "paso a paso" que dependerá, en gran medida, de los casos de covid-19 y del avance de la campaña de vacunación, que en estos momentos roza el millón de dosis administradas.

El propio Ejecutivo autonómico duda de que Aragón pueda bajar del nivel 2 a corto plazo. Podría costar "semanas" o incluso no suceder en todo el verano, de ahí que se estén buscando alternativas para reactivar la economía sin lastrar la evolución sanitaria.

Recuperar las pistas será "la última opción", según Falo, ya que es "donde más posibilidades hay de transmisión". El pasado verano, de hecho, aquellos locales que reabrieron tras el salto a la llamada ‘nueva normalidad’ tuvieron que readaptar sus instalaciones e instalar mesas en estos espacios, situación que se ha repetido esta última semana en aquellos negocios que han vuelto a levantar la persiana.

La intención es que las novedades se vayan comunicando, como ha ocurrido hasta la fecha, cada 15 días, por lo que la realidad de estos establecimientos, que acumularon más de 400 días de cierre, podría ser bien distinta a principios de julio. El ritmo lo marcarán también los efectos que tengan las medidas que se vayan tomando. Es decir, si se percibe un aumento de casos tras las primeras flexibilizaciones, el resto podrían ralentizarse o quedar ‘en pausa’ hasta que la situación se recondujese.

El cambio más inmediato será de horarios. Actualmente está permitida una apertura hasta las 0.00, al igual que sucede con bares y restaurantes. La intención sería "marcar un diferencial" con el resto de la hostelería para distinguir entre unos y otros. Está por ver si la ampliación sería hasta las 2.00 o las 3.00 –marco que hasta esta semana se había marcado el Consejo Interterritorial pese a la oposición de varias comunidades autónomas–, aunque esta última opción parece partir con ventaja, ya que coincide con las reivindicaciones del sector.

Este próximo fin de semana, los negocios podrán abrir hasta la medianoche en todo Aragón, y podrán hacerlo utilizando sus equipos de música, ya que, según el propio Departamento de Sanidad, la normativa actual "ya lo permite". Se trata de una cuestión que había despertado dudas en los últimos días, pero a la que la Consejería no pone reparos. De hecho, tras las últimas flexibilizaciones, las salas de conciertos ya han retomado la música en vivo.

Donde por el momento no hay entendimiento con el sector es en materia de aforos. Los empresarios defienden el criterio de "ratios por metro cuadrado". Sin embargo, Sanidad seguirá confinando en el sistema actual de porcentajes, con rangos del 30%, el 50% o el 75% en función del nivel de alerta sanitaria, una decisión que los afectados ven "incompatible" con la realidad dadas las dimensiones de las salas y la necesidad de guardar una mínima distancia social entre las mesas.

El compromiso, pese a todo, parece ser tratar de buscar una solución para encontrar respuestas a los problemas planteados.

"No se ha ido contra nadie"

Estos últimos días, el sector ha asistido "atónito" al último giro de guion de Gobierno y comunidades autónomas, que han dado marcha atrás a la hoja de ruta aprobada hace solo una semana tras la decisión de la Audiencia Nacional de suspender las restricciones. Por este motivo, sus representantes exigen a "claridad" a las instituciones. "Vuelven a jugar con el futuro de los negocios y de las cientos de familias que dependen de ellos en Aragón", lamentó el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Salas de Fiesta, Baile y Discotecas de Zaragoza, Alberto Campuzano.

El colectivo espera, tras la charla de esta última semana, que el Departamento que lidera Sira Repollés "cumpla" y que las ayudas, competencia de la Consejería de Industria, lleguen cuanto antes teniendo en cuenta que el plazo de solicitudes acaba el próximo día 22 y que el Ejecutivo autonómico tiene tres meses para contestar.

En dicha conversación, el director general de Salud Pública insistió en que el Gobierno aragonés "no ha ido en contra de ningún sector", sino que a pubs y discotecas les ha tocado convivir con una pandemia que ha ‘castigado’ a aquellos espacios en los que el riesgo de transmisión es mayor.