La casa Alejos de Urriés, en grave peligro desaparecer

Los restos del edificio acaban de ser incluidos en la Lista Roja del Patrimonio que elabora la asociación Hispania Nostra y que recoge más de 800 monumentos españoles en peligro.

La casa Alejos de Urriés.
La casa Alejos de Urriés.
Heraldo.es

La casa Alejos, en Urriés (Zaragoza) presenta un estado de profunda ruina. La fachada principal del edificio muestra un aspecto pésimo por falta de conservación, ya que en estos momentos se halla totalmente abandonada. Existe peligro inminente de desaparición con caída a la vía pública. Los restos conservados del muro sureste se hallan consolidados, pero podrían ser arrastrados en gran medida por el derrumbe de la anterior.

Por estos motivos, acaba de ser incluida en la Lista Roja del Patrimonio que elabora la asociación Hispania Nostra (www.listarojapatrimonio.org) y que recoge más de 800 monumentos españoles que corren el riesgo de desaparecer si no se actúa de inmediato.

El inmueble, ubicado en la calle Cantón nº 5, se localiza en la zona más elevada de la villa, en su momento cerca del castillo (hoy desaparecido). En la actualidad, se conserva parcialmente la fachada principal, fragmentos de dos habitaciones superpuestas que se encuentran adosadas a la cara interna de ésta y parte del muro sureste. El resto es un solar sin uso.

La cara externa de la fachada está realizada con sillares de arenisca que presentan diferentes proporciones y labra de aceptable calidad, a diferencia de la interna y del muro sureste, que lo hacen con mampostería del mismo tipo de piedra. Los elementos significativos del edificio, indicativos de la importancia que éste tuvo siglos atrás, quedan emplazados en su muro principal.

En la zona central de éste se abre una ventana de proporciones rectangulares, con alféizar perdido casi en su totalidad y dintel epigráfico: dos corazones flanquean la leyenda “MIGVEL GIL”. En un sillar próximo, de gran longitud, aparece otra inscripción con estilo de grafía diferente a la anterior: “Bartolom Gil. AÑO 1642”.

Apeando sobre el dintel de la ventana, y descentrado con relación a ésta, se localiza un blasón heráldico flanqueado por pilastras (catalogado como BIC) , coronado todo por un frontón partido. El conjunto, realizado con piedra arenisca, se complementa en la zona superior con tres triángulos isósceles rematados con bolas. Estilísticamente, es de una data coetánea a las inscripciones

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