El Justicia de Aragón pide vigilar el uso de pisos turísticos para reuniones ilegales
Solicita que se establezca una coordinación entre los equipos policiales para que puedan cursar denuncias ante la DGA.
La proliferación de fiestas ilegales en pisos turísticos ha llegado hasta el Justicia de Aragón, quien ha remitido al Departamento de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial una serie de sugerencias a fin de garantizar la convivencia y el cuidado de las medidas sanitarias en las comunidades de vecinos. Entre ellas, reclama que el órgano competente en materia de turismo actúe en las labores de inspección, y en su caso sanción, respecto al cumplimiento de los requisitos sobre los cuales se concedió la licencia turística. Se refiere, entre otros, a que se cumplan los aforos establecidos, no superándose el número de personas que pueden estar en el piso por la licencia concedida.
Asimismo, pide que se establezca la "oportuna coordinación" entre la Policía Local, la Nacional y la Adscrita para poder cursar las correspondientes denuncias al Departamento pertinente. Por último considera determinante que se pueda "clarificar" el marco normativo existente o promover una norma para establecer una "mayor implicación y un régimen de responsabilidad de los gestores de la viviendas en relación con las conductas de los usuarios" que pueden afectar a la convivencia de los vecinos del inmueble.
Los vecinos damnificados aseguran que en algunos de estos inmuebles se juntan más personas que las permitidas por la normativa sanitaria -actualmente establecido en seis en las zonas no confinadas- y también a las que tiene permiso como alojamiento turístico per se. Además, lamentan que hay movimiento durante toda la noche, incluso llegan a coincidir con personas sin mascarilla y con vasos con bebida en las zonas comunes.
Por ello, el Justicia recuerda que, según la normativa aragonesa, los responsables de las infracciones administrativas son los propietarios o canales de comercialización de la oferta turística. En este sentido, recalca que a la hora de alquilarlas, no deben "perder de vista" la función turística de estas viviendas.
