3 de 33: Aragón destaca entre las maravillas naturales de España para ‘The National Geographic’
La prestigiosa revista de viajes suele destacar rincones de Zaragoza, Huesca o Teruel en sus listas de recomendaciones para escapadas a lo largo del año. En esta ocasión, tampoco se ha olvidado de la comunidad aragonesa.
La revisa ‘The National Geographic’ suele ser generosa con las listas viajeras, tanto en ámbitos locales como nacionales e internacionales. Cuando hace una apuesta temática ofrece a sus lectores la posibilidad de apropiarse de ese listado e intentar completarlo poco a poco, en la medida de las posibilidades de cada cual. En esta ocasión se han centrado en las maravillas naturales de toda España, islas incluidas. Las Canarias, por cierto, están muy bien representadas, con diversas referencias que muestran la variedad de paisajes que encierra este entorno volcánico y espectacular en medio del Atlántico.
Entre los lugares destacados hay dos navarros, uno de ellos muy cerca de la divisoria aragonesa. La impresionante Selva de Irati no podía faltar: desde Pamplona hay algo más de 100 kilómetros, y la ruta más habitual es entrando en territorio francés. Las Bardenas Reales, a tiro de piedra de Tauste, es otro clásico en la selección nacional de regalos naturales para la vista.
Estas son las maravillas naturales de Aragón
En cuanto a las selecciones en terreno aragonés, aparece una compartida con Cataluña: el Congosto de Montrebei, que marca el límite entre la provincia de Huesca y la leridana. Ese cañón de impresionantes muros a los lados del embalse de Cañelles, con las pasarelas de Montfalcó y la cercana muralla china de Finestras, fue imagen de Turismo de Aragón hace unos años.
Tampoco falta una recomendación para visitar el Reino de los Mallos, desde Riglos a Agüero en Huesca y Peña Rueba, en el término zaragozano de Murillo de Gállego. A los aragoneses no les sorprende esta mirada de respeto hacia uno de los símbolos más característicos del paisaje aragonés, imán para los escaladores de pared y dibujo fantástico en el horizonte, a medio camino entre Zaragoza y el Pirineo.
Como las listas son finitas, siempre se quedan cosas interesantes en el tintero, pero la revista no se ha olvidado del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, con la mayor concentración de tresmiles de toda España y un paisaje impresionante, desde las cascadas (como la famosa Cola de Caballo) a los circos, praderas verdes e ibones de fábula.
Maravillas naturales en el resto de España
En el resto del listado destaca el Timanfaya de Lanzarote, la playa de Bolonia y su duna gigante en Cádiz, las increíbles Médulas del Bierzo, la playa de las Catedrales en Ribadeo (Galicia) o los Pilares de los Órganos en La Gomera, una versión a orillas del mar de los Órganos de Montoro en la ‘Silent Route’ de Teruel.
Dos clásicos como Doñana (Huelva) o las Cuevas del Drac en Mallorca no falta, como el extremeño valle del Jerte en flor cada primavera; también llaman la atención las Grutas de San José en Castellón y la célebre Caldera de Taburiente en la isla de La Palma.
