El pueblo bonito de Teruel, un imprescindible del Maestrazgo y final del camino del Cid
Este municipio turolense de 382 habitantes es una parada obligatoria en Aragón y cuenta con un patrimonio arquitectónico, con un espectacular palacio reconvertido en hotel como joya de la corona.
La provincia de Teruel es la gran desconocida de Aragón, pero no por ello es menos merecedora de una visita ya que, además de sus paisajes y su gastronomía, tiene el mayor número de pueblos en la lista de los más bonitos de España, con representantes de varias comarcas. Esconde tesoros de lo más llamativos, así como los cinco pueblos más altos de la comunidad, y el más alto de nuestro país. Sus entornos naturales son envidiables, ya que muchos de ellos se enclavan en montes o sierras espectaculares, así como destacan -algunos de ellos- por sus pocos habitantes. Y hay otros cuyos atractivos se multiplican si hablamos de patrimonio.
Qué ver en La Iglesuela del Cid, una pequeña villa de Teruel
La última parada de la ruta cultural del Camino del Cid nos lleva a este pequeño pueblo del Maestrazgo, ubicado a 1227 metros sobre el nivel del mar, y a los pies de uno de los múltiples morrones que jalonan la comarca. Esta bonita villa cuenta con un casco urbano de excelente conservación que le ha valido ser declarado Conjunto Histórico Artístico, así como con las muestras más llamativas de la construcción con piedra seca, que se aprecia en muros y casetas por todo el término municipal.
El casco urbano está presidido por la Torre de los Nublos, que data del siglo XIII y es la antigua torre de homenaje del castillo templario adosado a las Casas Consistoriales, del siglo XVI. Un imprescindible en el pueblo es el Portal de San Pablo, la única puerta de la antigua muralla que se conserva de las cinco que tuvo en la antigüedad.
Este pueblo turolense de 382 habitantes, situado muy cerca de la frontera con la vecina Castellón, vivió un largo periodo de bonanza económica en el pasado, fruto de la cual atesora bellos ejemplos de arquitectura civil y religiosa, repartidos por sus empedradas calles y en su magnífica plaza Mayor. Asimismo, un paseo por el pueblo nos permite contemplar un gran número de palacios renacentistas como las casas Guijarro, Grande y Aliaga.
Los edificios más destacados en esta bonita villa de Teruel son el Ayuntamiento, la Casa del Blinque, la iglesia de la Purificación y el palacio Matutano-Daudén, convertido un establecimiento hotelero de cuatro estrellas perteneciente a la Red de Hospederías de Aragón.
El Hotel Palacio Matutano-Daudén para viajar en el tiempo en Teruel
Este tesoro de La Iglesuela del Cid ha enamorado a 'National Geographic', sobre el que recientemente ha publicado un reportaje. Esta impresionante casa-palacio data del siglo XVIII, y está declarada Monumento Nacional. El acogedor hotel en el que fue reconvertido forma parte del club Rusticae y cuenta con 35 habitaciones dobles de diferentes características.
Entre ellas destaca la gran suite, conocida como 'la cama del obispo' por una obvia razón: aquí se alojaba cuando visitaba el pueblo. Esta habitación conserva el mobiliario de la época y ofrece unas vistas espectaculares de la iglesia de la Purificación, las Casas Consistoriales y la casa Blinque.
Ubicado en la calle Ondevilla, 4, puedes reservar una habitación en este hotel escribiendo un email a reservas@palaciomatutanodauden.com o llamando por teléfono al 964 88 04 05, así como a través de la página web del alojamiento.
Los interesantes alrededores de La Iglesuela del Cid
En las inmediaciones del pueblo se encuentra el Santuario de Nuestra Señora del Cid, levantado a partir de un antiguo mausoleo romano y también conocido como la ermita de la Virgen del Cid porque está dedicado a esta virgen. Es llamada “del Cid” porque Rodrigo Díaz de Vivar visitó estas tierras en varias ocasiones.
Por otra parte, la localidad forma parte del Parque Cultural del Maestrazgo, un territorio con rico patrimonio natural y cultural donde se combinan una impresionante geología y yacimientos arqueológicos con valiosos ejemplos del gótico levantino, la arquitectura renacentista y el barroco.
Asimismo, los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de varios senderos señalizados que atraviesan el municipio y ofrecen la posibilidad de disfrutar del bonito entorno natural de la zona. De igual forma, se puede realizar una bonito excursión hasta el vecino núcleo de Casas de San Juan, perteneciente al municipio de Cantavieja.
Dónde comer en La Iglesuela del Cid
Una buena opción para comer en este pueblo del Maestrazgo turolense es el Restaurante Torre de los Nublos. Se sitúa en la calle San Pablo, 6, y cuenta con menús degustación, menú infantil y una amplia carta con productos de temporada.
Cómo llegar a La Iglesuela del Cid, en Teruel
Para llegar a La Iglesuela del Cid desde Teruel hay que tomar la A-226 en un trayecto de una hora y media en coche. Por otro lado, para llegar desde Zaragoza hay que tomar la N-232 en un trayecto de dos horas y 40 minutos en coche.
