Hallan una iglesia visigoda inédita en la localidad burgalesa de Olmillos de Sasamón
El hallazgo dataría de los siglos VI-VII después de Cristo y tiene unas dimensiones de 8 por 14 metros.
Los trabajos de excavación para esclarecer la fundación, y posterior abandono, de Segisamo, la ciudad romana que dio origen al Sasamón actual (Burgos), han permitido descubrir este verano una iglesia visigoda inédita, gracias al uso de un georradar de alta resolución, que dataría de los siglos VI-VII después de Cristo y da testimonio de una nueva fase de ocupación.
El hallazgo ha tenido lugar en la pedanía de Olmillos de Sasamón, en el lugar de Santa Olalla, donde el equipo de investigación de la iniciativa romanarmy.eu, impulsora del proyecto, ha estado trabajando durante el mes de agosto y en el que, gracias a la fotografía aérea, habían conseguido documentar ya un gran complejo romano que correspondería con una gran villa o asentamiento suburbano tardorromano.
Los investigadores disponían también de indicios de un edifico rectangular rematado en ábside, han explicado en una nota de prensa, y ahora con el empleo de un georradar de alta resolución se ha podido documentar la planta completa de un posible edificio de culto paleocristiano.
El @IAM_CSIC y la @usal descubren en Olmillos de Sasamón una iglesia visigoda inédita
— CSIC Andalucía y Extremadura (@CSICAndalExtrem) August 31, 2023
El hallazgo contribuye al estudio de la implantación del cristianismo en la Meseta y el papel que aristócratas y obispos visigodos jugaron en la difusión del nuevo culto en el medio rural pic.twitter.com/4d9v1MubBy
La iglesia tiene unas dimensiones de 8 por 14 metros y tiene una orientación ONO-ESE, una variación que depende de la advocación de la iglesia siguiendo la salida del sol en el día del santoral, una liturgia introducida en el cristianismo en el siglo IV d. C.
El cuerpo central está rematado por un ábside semicircular de 4,5 metros de luz en su lado sureste y cuenta con dos espacios anexos con unas dimensiones de 4 por 5 metros, posibles baptisterio y nártex.
Todo ello lleva al equipo de excavación a indicar que podrían estar ante una iglesia visigoda de los siglos VI-VII después de Cristo, similar a la burgalesa Santa María de Mijangos (Merindad de Cuesta Urria) o a otros lugares de culto cristianos como la villa de Fortunatus (Fraga, Huesca) o la iglesia exenta en Torre de Palma (Monforte, Portugal).
“El hallazgo de esta iglesia permite conocer una nueva fase de ocupación del territorio de la ciudad de Segisamo tras el abandono de las grandes villas tardorromanas en el siglo V d. C., además de contribuir al estudio de la implantación del cristianismo en la Meseta y el papel que los aristócratas y obispos visigodos jugaron en la difusión del nuevo culto en el medio rural”, han explicado.
La iglesia se localiza en un amplio conjunto monumental de época romana que reúne al menos 13 edificios, muchos de ellos inéditos, entre las que destaca una mansio, edificio destinado al reposo, alimentación y cambio de caballos en relación con la vía que comunicaba Segisamo con Clunia.
Junto con este hallazgo en Olmillos, el equipo de investigación ha estado trabajando este verano en los entornos de la colegiata de Santa María La Real de Sasamón, en el que sería el corazón de la antigua Segisamo, mediante la apertura de dos sondeos que han permitido también realizar importantes descubrimientos que ayudarán a comprender mejor la evolución de la ciudad romana.
Se ha excavado en una zona utilizada durante muchos años como era, pero que antes estaba entre los límites del camposanto de la iglesia, de ahí que se hayan localizado los restos de al menos siete personas enterradas en sencillas fosas, que podrían haber sido enterradas antes de mediados del siglo XIX.
Los trabajos han sacado a la luz también muros romanos y edificaciones de los siglos III y IV, derruidas o abandonadas, que dan testimonio del pasado romano del municipio burgalés, como indicase uno de los investigadores, Jesús García Sánchez, a EFE días atrás en una primera aproximación al resultado de la campaña estival.
Así, los arqueólogos tienen testimonios de la existencia de estructuras de época medieval y romana, si bien prácticamente expoliadas por el continuado uso de las ruinas como cantera para otras empresas constructivas.
