zaragoza

El Buen Jardinero, la floristería zaragozana que le gustaría a Enid Blyton

Recién inaugurada, está especializada en arreglos de estilo alemán, escultóricos, relajados y con guiños silvestres. También tiene material de jardinería y productos especiales llegados de Bulgaria, como cremas o cerámica.

Tiene El Buen Jardinero la virtud de transportarte a otros mundos. Cuando uno se planta frente a esta nueva floristería de la zaragozana calle del Porvenir (un nombre ya un poco de cuento) saborea la atmósfera de las historias de Enid Blyton. Huele a tarta de ruibarbo y cerveza de jengibre. David Navarro está detrás de este proyecto, reflejo de sus gustos y vivencias. De formación periodista, vuelca desde hace años sus conocimientos sobre flores y plantas en el blog El Buen Jardinero. Con los años, lo que comenzó siendo una afición ha pasado a ser su profesión. Tras formarse en varios cursos, se desplazó a Múnich para aprender desde la experiencia con una de las floristas más prestigiosas de Alemania: Petra Müller.

De ese país se volvió con la idea de convertir el blog en tienda. Con la forma de una floristería alemana.

Pero, ¿de qué hablamos cuando hablamos de floristería alemana? Lo explica David: "Son ramos relajados, en los que las flores respiran. Tienen un aire escultórico a la par que silvestre. Me gusta pensar cuando los hago que las mariposas pueden volar en el espacio que dejo entre las flores...".

Además de los ramos alemanes, El Buen Jardinero trae otras modas florales poco o nada vistas no solo en Zaragoza, sino en España. Es el caso de los ramos de flor seca. "Hay que olvidarse de que estos ramos son rancios. En Europa ahora los ramos secos son lo más moderno. Y si bien pueden ser eternos, la idea es que, al tener unos precios asequibles, cuando uno se aburre de un ramo seco, lo puede deshacer, dando otra vida y uso a esas flores. Y comprar otro", explica. También trabaja los herbariums: delicadas flores secas en fanales o tubos de ensayo.

Pero no solo de arreglos florales vive esta floristería. El negocio ofrece un buen abanico de material para jardinería de importación alemana. En gran parte tan original como asequible. Hay vaporizadores de agua decorativos por 7 euros, guantes de tejidos 'liberty' por 5 euros, bolsos por entre 18 y 23, planchas para secar plantas o ramos -colgándolos bocabajo (es muy decorativo)-, por entre 10 y 15 euros.

El Buen Jardinero tiene también una pequeña puerta abierta a Bulgaria (de donde procede Jari Estefanoff, el marido de David). De ahí proceden bonitas cerámicas artesanales y cosmética a base de rosa mosqueta, un producto emblema de este país.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión