CENTENARIO DE GALDÓS. 'ARTES & LETRAS'

Volver a Benito Pérez Galdós un siglo después

Francisco Cánovas Sánchez, en su biografía del autor, se centra en lo que tiene de gran novelista que creó personajes femeninos de gran hondura

Una ambiciosa biografía de Galdós.
El escritor en el salón de su villa San Quintín.
BNE

Benito Pérez Galdós (Las Palmas, 1843-Madrid, 1920)  sigue siendo un descubrimiento porque su lectura siempre es un placer, su narrativa va hilando tramas, creando personajes, logra que el lector se adentre en la llama de la trama y quede iluminado por la fuerza de sus miradas al mundo.

‘Benito Pérez Galdos. Vida, obra y compromiso’ es el libro que ha escrito el historiador Francisco Cánovas Sánchez, otra vuelta a un gran escritor, después de la mirada que impregnó Pedro Ortiz Armengol, un diplomático que nos contó amenamente las vicisitudes del gran Galdós. No es empresa fácil narrar la vida de un hombre que creó tantos personajes, tan prolífico en su narrativa, además que decidió comprometerse con el partido republicano, provocó un notable escándalo en Madrid con su ‘Electra’, obra de teatro que encendió las iras de muchos, aunque fue defendido por los grandes escritores del 98.

Cánovas Sánchez va contando la vida de don Benito, envuelto en la madeja de escritores, políticos, a veces simplifica, porque no quiere ahondar demasiado, pese a las quinientas páginas del libro, quizá porque el libro necesitaría muchas más si se detiene en lo minucioso, en cada relación, en cada obra. Cánovas prefiere centrarse en lo que Galdós tiene de gran novelista, de figura señera. Señala, con mucho tino, cómo creó personajes femeninos de gran hondura, como Fortunata, Jacinta, Marianela y tantas otras.

Ese espíritu prevalece en el libro, el amor por el arte y la música, su opinión sobre el caciquismo, sobre la religión, todo ello es desentrañado con habilidad, porque Galdós fue un hombre que, sin la vena exaltada de Unamuno, fue abriendo senderos, despertando conciencias y en sus novelas fue dejando pinceladas muy jugosas sobre el mundo de la cultura.

Sigue Galdós la sombra de Cervantes, el eco que este dejó en la narrativa española, esa facilidad para crear personajes que sobreviven, se convierten ya en inmortales y quedan para siempre en la memoria. Cánovas Sánchez hace hincapié en ese esfuerzo, porque la narrativa del siglo XIX, siglo en el que es experto el historiador, fue una de las más integradoras de la historia, ya que logró aunar siglos anteriores y presagió ya lo que sería el XX, un siglo que rompería todos los hilos, porque se explica sobre las guerras y sobre el absurdo ya de un ser humano que ya carece de personalidad, como nos expresó Robert Musil en su famoso ‘El hombre sin atributos’.

Una ambiciosa biografía de Galdós.
Detalle de la portada de Alianza..
Archivo Heraldo.

Para Cánovas, el siglo de Galdós aún respira el aroma de otros tiempos, donde los personajes se tejen con una madeja que los personaliza, pero ya anticipamos un desdoblamiento, se puede ver en esos seres que dudan de sí mismos, como ocurre en ‘Nazarín’, novela que luego luego Buñuel -que sentía una gran predilección por el autor de ‘Tristana’ y ‘Halma’- imprimiría su especial sello.

Nos hallamos ante un libro que dibuja a un Galdós siempre activo, donde podemos ver su pensamiento, oírlo respirar, lo vemos en sus personajes, en su afán de hacer del siglo una novela extensa y llena de lecturas e interpretaciones.

En el 2020 se cumple un siglo de la muerte de Galdós. ‘Benito Pérez Galdós. Vida, obra y compromiso’ abre ventanas para saber mirar a un escritor que supera siglos y perspectivas, que, al igual que Cervantes, nos asombrará siempre, con su hondura para crear personajes que son más reales que la propia vida, seres que son ya atemporales y que nos hablan con una luz especial, una llama que nos alumbra en tiempos de tinieblas.

LA FICHA

'Benito Pérez Galdós. Vida, obra y compromiso'. Francisco Cánovas Sánchez. Alianza, 2019. 504 páginas.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión