Los aficionados a la exploración y análisis de cielos peculiares están de enhorabuena estos días en el sureste de España. Desde el inicio de la actual semana, mirar al horizonte en lugares como Murcia, Alicante o Almería es una fantasía de color naranja, digna de las mejores historias que que Scherezade le contaba al sultán para que no la matara al día siguiente en 'Las mil y una noches'. El ‘culpable’ de este bodegón anaranjado en movimiento es un excepcional episodio de polvo procedente del desierto del Sahara, que trae a la península el espectáculo propio de latitudes más cercanas al trópico. Por si fuera poco, este fenómeno meteorológico se está extendiendo este martes por otras zonas de la geografía española, que incluyen parcialmente el Pirineo aragonés.

¿Qué es la calima?

La calima es un fenómeno meteorológico que se produce en la atmósfera; se manifiesta de forma muy notoria, porque consta de partículas sólidas muy pequeñas en suspensión que al estar en gran número y en un espacio concreto, hacen que el aire parezca opaco a la vista. El cielo parece turbio, aunque no se trata de un episodio violento semejante al de las temibles tormentas de arena; lo que pasa, simplemente, es que todo está naranja.

Estas partículas suelen ser de polvo y arena, aunque también pueden estar formadas de cenizas y arcilla. El tamaño de éstas oscila entre unidades inferiores a las micras y decenas de micras.

Impresionantes imágenes de la calima en España

Tipos de calima

Existen dos tipos de calima en función del origen de esas partículas. La calima que está esta semana en los cielos españoles es la calima de tipo 'A' o calima 'natural' que se produce a partir del transporte de arena, sales del agua (sodio) u otros elementos presentes el ambiente. Cuando su origen es principalmente arena del desierto se suele hablar de “polvo en suspensión”. Se da con frecuencia en las Islas Canarias (sobre todo en Lanzarote y Fuerteventura) cuando los vientos de componente este arrastran polvo del desierto del Sáhara hasta el archipiélago, provocando una reducción considerable de la visibilidad.

El otro tipo de calima es la 'B' y son los llamados eventos especiales. Su origen reside en la contaminación o en los incendios forestales. Se produce en las grandes ciudades como en Madrid en esta época del año y bajo condiciones de gran estabilidad atmosférica. La ausencia de viento y precipitaciones junto a la inversión térmica propician un estancamiento de los contaminantes (procedentes de las calefacciones o del tráfico) sobre las ciudades de forma que se reduce la visibilidad y, especialmente, la calidad del aire.

¿Es peligrosa para la salud la calima?

La inhalación prolongada de estas sustancias resulta perjudicial para la salud. No obstante, resulta especialmente peligrosa para la salud la respiración de las partículas resultantes de la calima de tipo 'B'. Los principales síntomas que pueden afectar a las personas están relacionados con problemas respiratorios e irritación de las mucosas: obstrucción nasal, picor en los ojos y tos continua. Si la calima es persistente y su densidad abundante, pueden aparecer incluso broncoespasmos (dificultades importantes para respirar), dolor torácico y asma, especialmente en personas con alergias u otras patologías respiratorias. Además, pueden desencadenarse crisis de ansiedad.

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¿Hasta cuándo durará la calima en España?

La previsión es que el polvo sahariano vaya avanzando de sur a norte por diferentes puntos de la geografía española y el máximo se alcanzará este miércoles al amanecer. Sre prevé que se mantendrá durante toda la jornada del miércoles y jueves. Lo normal es que estos episodios de calima, al menos en España, suelan durar apenas unos días. La calima se retira al producirse un cambio de masas de aire, propiciado por viento y/o lluvia que ayudan a dispersar las partículas en suspensión.