vinos de aragón
Tierramaestrazgo: vinos muy auténticos que hacen disfrutar
De esta bodega de Mas de las Matas salen un blanco y un rosado jóvenes y un tinto crianza.
Algún sabio dejó escrito por algún lugar que disfrutar no es solo una parte de la vida, es su esencia. El disfrute, como combustible de la felicidad, se puede encontrar de muchas formas, también en los mundos que conforman el universo gastronómico. Muchas veces, se halla cual pequeño tesoro dentro de una botella de vino con una humilde etiqueta.
Es el caso de los vinos que nos ocupan hoy, los que elaboran en la Bodega Tierramaestrazgo, acogida a Vinos de la Tierra del Bajo Aragón y ubicada en la bella zona turolense de la que toma nombre esta empresa familiar, cuya cabeza visible es el experto vitivinicultor Antonio Sisqués, con muchos años de experiencia en la elaboración de vinos en Aragón. Él, mejor que nadie, sabe que el vino auténtico se hace ya desde la viña, poniendo todo el cariño y toda la sabiduría en la producción de unas uvas que extraigan las esencias de la tierra y del clima.
Solo elaboran tres referencias, más que suficientes para hacerse con el mencionado disfrute. Me ha gustado especialmente el blanco de garnacha blanca de la última cosecha, que presume de un precioso color que invita a beber desde el momento en que se escancia en la copa. Destacan sus aromas a flores blancas, frutas con hueso como el albaricoque, alusiones tropicales como la piña y cítricos variados, entre los que se adivina una piel de limón. La boca es inmensa, uno de los vinos blancos más redondos que he catado este año, perfectamente equilibrado, un auténtico gozo para el paladar. Uno de mis vinos imprescindibles para este verano. Tiene un grado alcohólico del 12,5% y el precio es de 7,50 euros.
A un alto nivel también se sitúa el rosado 2019, elaborado a partir de uvas de garnacha tinta. Dotado igualmente de una atractiva presencia en la copa, sus aromas son límpidos en forma de frambuesas y fresas, chucherías y regaliz, además de algunas notas florales que recuerdan la violeta. Al pasarlo por la boca es un portento de equilibrio, con una acidez exquisita. Grado alcohólico: 14%. Precio: 7 euros.
La garnacha tinta, el valor más preciado en los viñedos de esta y otras partes de Aragón, es la base, naturalmente, del tinto que comercializan con un paso por barrica de unos seis meses para darle más empaque y más expresión. En estos momentos está en el mercado el de la añada 2018 y se encuentra en un momento cumbre, aunque su plena forma se podrá gozar con la misma intensidad durante varios años. Es un tinto muy frutal, enriquecido con referencias en forma de especias, de plantas como regaliz y otras aromáticas de monte bajo. En la boca es goloso y también tiene una acidez sumamente agradable. Otra garnacha de altos vuelos. Grado alcohólico: 14%. Precio: 11,45 euros.
En suma, unos vinos muy auténticos que merecen un gran aplauso y que engrandecen el gran trabajo de la familia y las personas que sustentan este proyecto, en una finca de 23 hectáreas de secano, en la que las viñas comparten su vida con olivos y almendros, con la cercana presencia de pinos y carrascales.
