Nació en 1979 como Guía del Viajero aunque popularmente se conoció como Guía Campsa y es desde 2009 la Guía Repsol, que en su 40 aniversario se renueva para volver a ser la "guía española de referencia en España" con el respaldo de los cocineros, que lo ven "necesario" para el sector gastronómico.
Tras presentarse anoche en San Sebastián, donde se entregó en un nuevo formato de gala el tercer sol a cinco restaurantes, el segundo a 23 y el primero a 53 por primera vez con el criterio de un comité de asesores unido al de la Real Academia de Gastronomía y las academias autonómicas, su directora, María Ritter, anunció para 2020 un nuevo sistema de clasificación que dé "máxima fiabilidad" y que trabajan con el Basque Culinary Center.
Los cocineros respaldan un cambio "necesario". Como Elena Arzak, al frente del restaurante más veterano con la máxima distinción de la Guía Repsol: cuatro décadas de forma ininterrumpida; "cuantas más guías con autoridad de calificación haya, mejor, porque llegarán a más gente y tocarán todos los ámbitos culinarios".
Maca de Castro, cuyo restaurante homónimo en Alcúdia (Mallorca) luce ahora tres soles, ha celebrado que la Guía Repsol festeje su 40 aniversario con un cambio cuya culminación, en 2020, esperan los cocineros con expectación. "Nos preguntamos ¿qué está pasando? Se ve algo nuevo y refrescante, impulsado por gente muy joven, y nos gusta".
Alberto Ferruz se lleva de San Sebastián tres soles para BonAmb en Xàbia (Alicante) y la impresión de que la Guía Repsol se está "haciendo más democrática y renovándose para que la gente vuelva a creer más en ella".
"Todo lo que sea apostar por promocionar la gastronomía y la industria turística es positivo", dice Marcos Morán, con tres soles en Casa Gerardo (Prendes, Asturias), mientras que Ricard Camarena, con la misma clasificación en el restaurante que lleva su nombre en Valencia, opina que "siempre es importante que una guía española cobre relevancia y peso en los lectores".
El segundo sol ha conseguido Rafa Zafra para Estimar (Barcelona) y agradece que la Repsol se esté revistiendo de "un ambiente fresco y renovado" en el que se premia a restaurantes que "ensalzan el producto español" algo que "debería ser su seña de identidad".
También el segundo ha logrado para La Salita (Valencia) Begoña Rodrigo, quien manifestaba que la Guía Repsol "debería" ser la de referencia en España porque "la necesitamos para afianzar al turista local"; con su recién estrenado segundo sol en Sollo (Fuengirola, Málaga), Diego Gallegos coincide y añade que "es muy importante que retome la fuerza que tenía cuando era la Guía Campsa".
Con tres soles Repsol en L'Escaleta (Cocentaina, Alicante), Kiko Moya reconoce que "nos hace falta una guía española fuerte", ve "favorables" los cambios y cree que "es una cuestión de tiempo que se consolide".
Javier Torres, que junto con su hermano Sergio acaba de obtener el tercer sol para Cocina Hermanos Torres (Barcelona) destaca que "si España es la potencia gastronómica más importante a nivel mundial, tiene que tener su propia guía, con criterio y personalidad propias", y Juanlu Fernández, que debuta con un sol en Lu, Cocina y Alma (Jerez, Cádiz), defiende "la importancia de que haya una guía de referencia nacional en cada país".
María Gómez, que también estrena sol en Magoga (Cartagena, Murcia), responde con un "¡ya era hora!" y Pedro Sánchez, que también debuta en la categoría con Bagá (Jaén), advierte de que "depende de lo serios que quieran ser y de la apuesta que hagan, porque una guía no es una gala sino el producto de un trabajo de campo de un año".
También Fran Martínez, con su primer sol para Maralba (Almansa, Albacete), señala que "se respira un cambio que se prevé positivo pero que solo será posible si van a hacer un trabajo serio y riguroso, valorando los restaurantes después de visitarlos".
Otros nuevos soles son La Tasquería (Madrid) de Javi Estévez que ve "necesario" un cambio y "claridad en los criterios para otorgar los galardones", y Taberna Verdejo (Madrid), donde ofician Mariam Reguera y Carmen Moragrega, quienes destacan que se ha apostado en este reparto de soles por "proyectos jóvenes y frescos" y bromean: "Si el cambio implica que nos han dado un sol Repsol después de seis años de vida del restaurante, es maravilloso".
