La Artillera, artesanas con mucho sabor

Artillera es el resultado del proyecto de Héctor Sanz y de su mujer, Pilar Clemente, dos grandes aficionados a la cerveza. Sanz llevaba tiempo elaborando su propia cerveza artesana en casa y, después de hacer varios cursos, uno de ellos en la Universidad de Alicante, decidieron sacar al mercado una marca que dejase bien claro desde el principio al consumidor cuál es su origen, tanto por su denominación comercial como por los ingredientes con que están confeccionadas: La Artillera. Elaboran dos tipos: la Trigueña –una ale hecha con trigo y con melocotón de Calanda, y con 5,5% de graduación alcohólica– y la Morena 7, muy tostada, con 7,7% de porcentaje de alcohol y con mucho protagonismo de la malta y muy compleja.

Ambas están pensadas para que gusten a la mayoría de paladares, así que no son excesivamente amargas y su punto fuerte son los aromas afrutados y el sabor potente, lo que las convierte en unas buenas aliadas para acompañar cualquier alimento, tanto en forma de tapas como de platos, sentados a la mesa. De hecho, próximamente saldrá al mercado el formato de tres cuartos de litro de ambas artesanas. Sus promotores están pensando también en otras variedades para enriquecer el abanico de la marca. Las etiquetas son muy llamativas y están inspiradas en Agustina de Aragón y en otras heroínas de los Sitios.

El precio de venta al público recomendado de cada cerveza es de unos 3 euros. El 80% de la producción se ha destinado a hostelería (las distribuye Ibercoa) y el resto se puede comprar en tiendas de Zaragoza, Alicante, Gerona y Lérida.

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