economía
Bionm Arquitectura: casas en tres meses con la industrialización de la construcción
La firma zaragozana, especializada en eficiencia energética y transformación digital, trabaja en proyectos 'passive house' y de edificación industrial.
Bionm Arquitectura trabaja desde la aceleradora de empresas de La Terminal de Etopia de Zaragoza para impulsar su crecimiento y el desarrollo de una línea de trabajo innovadora centrada en al "arquitectura industrializada". Su fundador, Pablo Carranza, suma varias décadas de experiencia como profesional. Tiene 41 años y lleva 15 trabajando como arquitecto. Se ha especializado en eficiencia energética en la edificación y la transformación digital de empresas, campos sobre los que también es divulgador y conferenciante, y en servicios profesionales de arquitectura innovando en los campos de sostenibilidad, digitalización e industrialización.
La estancia en una aceleradora de empresas les permite "establecer sinergias muy interesantes con otras empresas relacionadas con la digitalización, en nuestro caso destacamos el uso de la tecnología BIM y por el momento hemos podido valorar colaboraciones con empresas especializadas en impresión 3D, realidad virtual y aumentada, drones o blockchain", explica Carranza.
Tienen más de 40 proyectos en curso para clientes que van desde promotores, empresas, la administración pública y cliente final. Entre ellos, destaca la primera promoción Passive House Premium de España ubicada en Zuera (Zaragoza) y han participado en concursos públicos para la construcción de los primeros residenciales Passive House categoría Plus en Madrid y e Castilla La Mancha. Su trabajo en este campo fue reconocido y presentado en la pasada conferencia internacional Passive House de Alemania.
La empresa está formada por un equipo multidisciplinar de arquitectos, arquitectos técnicos e ingenieros con formación específica en estos campos. En su equipo en La Terminal se encuentran María Salas y Javier Giménez. Entre sus proyectos en viviendas de consumo energético cero o 'passive house' se incluyen las de nivel 'premium' en Las Lomas de Zuera. Se trata de una docena de inmuebles de alta gama en los que "además de reducir el consumo energía incorporan más energía renovable. Son viviendas que generan cinco veces la energía que consumen", explica Carranza. El excedente se puede utilizar para cubrir la climatización de la piscina, el cargador de un vehículo eléctrico y verter a la red para obtener una retribución, pone como ejemplos.
Más autopromotores tras la crisis sanitaria
"La pandemia ha impulsado el interés por construcciones más confortables y saludables, apartado donde contribuye enormemente la alta eficiencia energética", apunta sobre sus líneas de negocio actuales. Tras la experiencia del confinamiento para frenar los contagios de coronavirus observa que ha surgido "el interés por autopromotores que deciden abandonar la ciudad, adquirir una parcela en algún municipio y desarrollar una autopromoción que les permita disfrutar de mayor libertad y espacio, en general son perfiles que pueden teletrabajar". En estos casos entra la llamada "arquitectura industrializada" que permite construir una vivienda acortando plazos. Se utiliza entre los materiales principales el hormigón, que permite mantener el confort y la personalización, matiza, lejos de la idea tradicional de casa 'prefabricada'.
Este área de la "arquitectura industrializada de alta eficiencia energética" se ha podido desarrollar gracias al "alto grado de digitalización alcanzado en nuestros procesos de proyecto integrando el diseño de fabricación", apunta. Para ello están alcanzando "alianzas con empresas del sector y en especial con una empresa de prefabricados" aragonesa. Tienen dos proyectos en Madrid y Barcelona. Con este sistema 'industrializado' con el uso de prefabricados de hormigón, entre otros materiales, pueden edificar hasta cuatro alturas.
Destaca que se consiguen "construcciones extremadamente eficientes, confortables y saludables sin comprometer el grado de personalización y compromiso de la arquitectura con las necesidades del cliente". Los costes son similares a una obra convencional, pero los plazos se reducen a tres meses en el caso de una autopromoción. Este está siendo uno de los sectores al que le ven más potencial, junto a la eficiencia energética con la incorporación de renovables y hacia el que esperan crecer.
