La aragonesa Relax prevé facturar 35 millones y elevar al 10% la exportación
La empresa aragonesa encara este año con perspectivas de crecer tras haber caído su cifra de negocio un 3% en 2021.
Tras un ejercicio 2020 "muy bueno" por el ‘efecto hogar’ asociado a la pandemia y un 2021 en el que las ventas sufrieron una caída leve del -3%, la empresa aragonesa Relax ha arrancado 2022 con un crecimiento en ventas que les hace ser optimistas, y confiar en alcanzar una cifra de negocio de 35 millones este año frente a los 28 de 2020 y 27,7 millones de 2021. Las inversiones, el nuevo logo e imagen de marca y el cambio de timón en la cúpula directiva con Jon Jodra al frente les hace afrontar 2022 con buenas expectativas.
La pandemia por la covid supuso "una prueba de la agilidad" para esta compañía centenaria ante una situación desconocida que impactó en todos los niveles de la organización y del negocio. La respuesta de Relax, indicaron desde la empresa, fue colaborar con proveedores y clientes para entre todos poder gestionar de la manera más eficaz el aumento de la demanda del mercado, consiguiendo los objetivos marcados a pesar de los meses de inactividad en 2020.
Actualmente la situación de aumento del coste de materias primas así como de la energía y transporte están suponiendo un nuevo reto de búsqueda de la eficiencia. Y "el objetivo a corto plazo es situar la compañía en una facturación de 35 millones y duplicar el peso de la exportación en el medio plazo", señaló Francisco Palomares, director financiero. Actualmente, precisó, la exportación supone el 5% y los destinos son Francia, Italia y Portugal, pero "queremos duplicarla con mayor presencia en estos mismos mercados".
Relax emplea a 225 personas sumando a los de la fábrica del polígono Centrovía de La Muela, y a los de distintas delegaciones comerciales/logísticas por España, donde cuenta con 13 centros de almacenaje para cubrir toda la demanda nacional. Con una producción de más de 600 colchones diarios, Relax vende a todos los canales de distribución, desde grandes superficies, tiendas especializadas, mueblistas y hostelería.
Para cubrir estas diferentes necesidades, los desarrollos del equipo de I+D+i han creado una gama completa, desde colchones con procesos artesanales del capitoné (cosido a mano) a colchones especialmente pensados para deportistas, personas con problemas de espalda o sobrepeso, entre otros, apostando por el segmento alto y el valor diferencial.
Esther Quintana, consejera delegada de Relax, reconocía en la última feria del Mueble de Zaragoza que siempre han sido "muy resilientes, muy capaces de salir adelante no en esta crisis sino en todas". Hace dos años, "estábamos en la edición anterior de este certamen sin mascarillas, ahora con ellas, pero siempre adaptándonos". Lo fundamental, destacó, "es escuchar al cliente y aportar soluciones", convencida de "la importancia del colchón en la calidad del descanso y la salud".
