economía
Más 'cerrojazos' empresariales sin pasar por el concurso de acreedores con la pandemia
En Aragón, 76 empresas han solicitado la quiebra en el juzgado hasta mayo.
La crisis causada por la pandemia de covid-19 empieza a traer el aumento de los cierres de negocios por la vía tradicional del 'cerrojazo', sin recurrir al procedimiento concursal. Las quiebras "sumergidas" se reflejan en el desfase entre los datos de los juzgados de lo Mercantil y los del Fogasa, el Fondo de Garantía Salarial, organismo dependiente del Ministerio de Trabajo que se hace cargo de pagar los salarios pendientes y las indemnizaciones de los trabajadores cuando una empresa se declara insolvente.
Actualmente hay más pagos del Fogasa procedentes de insolvencias que concursos de acreedores en los juzgados, explican desde el Registro de Economistas Forenses (Refor-CGE), órgano especializado del Consejo General de Economistas.
En España, de enero a abril 2021, han aumentado los pagos del Fogasa en empresas pasando de 2.115 compañías en 2020 a 2.289 en 2021, lo que representa un incremento del 8,23%. La ratio que los compara con el número de concursos se sitúa en el 1,08.
"Economía sumergida concursal"
Debería haber "un 8% más de concursos", ya que hay más pagos del Fogasa que procedan de insolvencias que procedimientos en los juzgados. "Persiste la economía sumergida concursal que venimos comentando desde hace años en el Refor", denuncian desde el Refor. Esto supone que "muchas empresas en España no acuden al procedimiento concursal legal y recurren a otras vías como el 'cerrojazo'", señalan en su último informe.
En el mes de abril mejoran las cifras, pero el colectivo de economistas alerta de que 2020 y 2021 "pueden ser un espejismo por la moratoria", ampliada hasta final de año. Por eso, advierten que "a ver lo que ocurre cuando termine y cómo van evolucionando los próximos meses". Carlos Terreu, tesorero del Colegio de Economistas de Aragón y miembro del Refor recuerda que hasta que termine el año sigue en vigor la moratoria concursal. Gracias a ella, aunque una empresa se encuentre en dificultades que le llevarían a solicitar el concurso, puede retrasar la petición sin incurrir en responsabilidades sus administradores. Por ello, la verdadera dimensión de los concursos no se verá hasta 2022, salvo que se vuelva a prorrogar.
En los juzgados se nota también el empeoramiento de la situación de las empresas, aunque no se ha producido la avalancha de concursos que se auguraba sin moratoria. En Aragón, 76 compañías se han declarado en quiebra y han acudido a los tribunales a solicitar el concurso de acreedores hasta mayo, un 80,95% más que hace un año, entonces, en los primeros meses de la pandemia. El alza es de un 22,22% comparado con 2019, según los datos recogidos por la firma Axesor.
La compañía especializada en gestión de riesgo del crédito, perteneciente al grupo Experian, incluye estos datos en los resultados de su radar empresarial de concursos de acreedores de mayo. En España, en los cinco primeros meses del año se han alcanzado los 2.509 procedimientos. Esto supone un incremento del 76,44%, debido a que el año pasado se paralizó toda la actividad en los tribunales durante el confinamiento de marzo. Comparado con el ejercicio previo a la pandemia, se sigue registrando un aumento, pero del 24,83%, según Axesor, con los datos que recoge de los casos publicados en el Registro Mercantil. Terreu, desde el Refor, recuerda que todavía se está lejos de los máximos que se alcanzaron en la anterior crisis, la inmobiliaria y financiera de 2008, cuando se rozaron los 9.000 concursos al año en todo el país.
Entre las primeras 'víctimas' se encuentran empresas que han intentado refinanciar sus deudas "y no lo han conseguido", señala Terreu. Aunque suelen ser compañías que arrastran situaciones complicadas anteriores a la pandemia, esta ha empeorado su situación, reconoce el experto concursal. "El covid no ayuda porque para el que estaba resfriado ha sido la puntilla", reconoce. Además, comienzan a aparecer concursos en sectores más afectados por las restricciones aprobadas para el control de los contagios.
A nivel nacional destaca la hostelería, con un incremento interanual de casi el 304%, que registra máximos históricos hasta los 420 concursos, según el informe de Axesor. Las insolvencias en bares, restaurantes y hoteles se aproximan así a las del comercio, que sumó 472, un 206,45% más que hace un año.
Desde Axesor señalan que si a los datos anteriores se suman los 63 procedimientos que se declararon en el ocio (actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento, donde el aumento fue del 125%), "la conclusión es que los sectores más terciarizados y relacionados con el turismo representan el 38% de las insolvencias".
Además, el estudio recoge el aumento de las insolvencias en el sector de la educación. Se disparó un 550% en el mes de mayo, con un acumulado de 54 a cierre del periodo, esto es, un 184,21% más. Así, se sitúa "solo por detrás de hostelería, donde el aumento con respecto al mismo mes de 2020 fue del 581%". Entre las empresas dedicadas a la educación que se han visto más afectadas por la pandemia se encuentran las dedicadas a las extraescolares que han reducido su actividad a mínimos o desaparecido totalmente de los colegios durante el curso. Algunas se acogieron a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en marzo de 2020 y un año después no han podido sacar a sus trabajadores.
Por comunidades, Cataluña encabeza el informe de Axesor con 647 concursos de acreedores, un 96,66% más, seguida de la Comunidad de Madrid, con 518 y un 98,47% más y Valencia, con 375 y un alza del 71,23%. Según el balance, con excepción de Murcia, donde caen un 2,38% hasta los 41, los concursos de acreedores crecen en todas las regiones por encima del 20%, siendo Castilla y León la comunidad autónoma donde más aumentan en términos relativos, un 175%, seguida de Extremadura, con un 200% más.
