Huelga en Iberalbión contra una "precariedad que va a más"

El cambio de manos de Iberalbion, que era proveedor de servicios para el negocio de tarjetas bancarias hasta que fue vendido al grupo Wizink hace más de un año, no ha redundado en una mejora de las condiciones de los trabajadores sino más bien al contrario. Así lo denuncia la mayoría de la representación de trabajadores  que ha convocado una jornada de huelga para este viernes. "Queremos denunciar una precariedad que va a más: los horarios son peores, los incentivos se han reducido y cada vez es mayor la diferencia entre los trabajadores veteranos y los de nueva incorporación", ha manifestado Francisco Giménez, delegado de OSTA y presidente del comité de empresa. No ha sido todo el comité el que ha convocado el paro, sino los dos sindicatos con mayor representación: OSTA y UGT. "La plantilla nos estaba demandando soluciones porque en las reuniones mantenidas con la dirección nos han reconocido que había problemas e iban a solucionarlos, pero no ha sido así. Por eso vamos a la huelga, pero CC. OO. no la comparte", ha añadido.

Según Giménez, "se está haciendo mucho contrato temporal de 30 horas mientras la mayor parte de la plantilla está a 39 y no podemos permitir que la precariedad se siga implantando". Turnos de trabajo que  impiden la conciliación de la vida familiar y personal, la desmesurada presión a la plantilla y la excesiva carga de trabajo han provocado un deterioro en las relaciones laborales, argumenta el presidente del comité. "La creciente desigualdad entre trabajadores de primera y de segunda" son otras causas que alega para ir a la huelga.

Mañana comité y dirección de Iberalbión están llamados a una reunión en el SAMA. El comité espera que la empresa  ofrezca medidas concretas para aliviar el empeoramiento de condiciones de trabajo y evitar así  este paro de 24 horas.

Wizink es propiedad al 51% del fondo norteamericano Värde Partners mientras que el Santander tenía el 41% restante, pero recientemente parece ser que el fondo de inversión se habría quedado con la totalidad del negocio, si bien la operación está pendiente de ser autorizada por los organismos competentes.