Tras un 2011 en el que las ventas al extranjero alcanzaron el máximo histórico de 9.208 millones de euros, las exportaciones aragonesas cayeron un 8,5% -8.497 millones- en 2012, debido al descenso de actividad del sector del automóvil, que redujo su facturación en el exterior a casi un 30%. Sin embargo, sectores como el del textil o los electrodomésticos y, sobre todo, el aumento de las exportaciones fuera de Europa han maquillado un descenso que supera el de la media nacional, 3,7%, según datos del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

Las ventas dentro del continente han descendido en casi 1.000 millones de euros -un 11,6%- en un solo año y, mientras en 2009 acaparaban casi un 90% del total de exportaciones, su peso específico ha caído hasta el 80%, porcentaje que baja al 60% en la zona euro. Un hecho que no solo responde a la crisis económica que está afectando -en mayor o menor medida- a buena parte de los países comunitarios, sino a un considerable aumento del comercio exterior de Aragón con América del Norte, Latinoamérica, África y, sobre todo, Asia.

Gracias a países como China, Japón o Corea del Sur, las exportaciones aragonesas a esta zona han aumentado un 136% desde 2009 y ya suponen un 9,2% del volumen de negocio en el extranjero de la Comunidad, con casi 800 millones de euros. En los últimos tres años también han crecido un 137% los negocios con América del Norte y un 174% con Sudamérica. “La Unión Europea sigue siendo el principal foco de las exportaciones aragonesas, pero el resto de países están adquiriendo protagonismo. Mientras las exportaciones a países europeos han disminuido, el crecimiento de otros mercados ha sido importante. Por ejemplo, las exportaciones a China han crecido un 26% y a Brasil hasta un 30%”, analiza Nieves Ágreda, directora de Internacionalización de la Cámara de Comercio de Zaragoza.

“Aragón está llegando a más países e incrementando sus exportaciones a nuevas zonas, donde además el potencial de crecimiento es muy alto. Después de entrar en los mercados americanos y asiáticos, están apareciendo mercados africanos en el horizonte donde ahora apenas hay presencia aragonesa y se puede crecer”, explica Ágreda. Sin embargo, el camino hacia nuevos países no es nada fácil: “Tenemos condiciones y empresas para exportar todo tipo de productos, pero es un proceso largo que necesita un buen estudio de mercado y muchas negociaciones. Las empresas que están logrando resultados ahora comenzaron hace al menos cuatro o cinco años”.

Pero la expansión aragonesa en mercados emergentes no ha sido suficiente para frenar la caída europea, que sigue siendo el principal foco importador de productos de la Comunidad. De hecho, nueve de los diez países que más volumen de exportaciones recibieron de Aragón son europeos, y tan solo Estados Unidos logró colarse en 2012 en este 'top ten'. Alemania y Francia acaparan un tercio de las ventas aragonesas en el extranjero, seguidos por el Reino Unido (10%), Italia (9,9%) y Portugal (5,6%). La lista la completan Bélgica, Países Bajos, Turquía, Estados Unidos y Polonia.

Menos automóviles, más textil

Al margen del destino de las productos aragoneses, la caída del año 2012 ha estado marcada por el sector del automóvil, que supone una parte muy importante de las exportaciones aragonesas. “Representa casi una tercera parte de las exportaciones de Aragón, por lo que cualquier variación de este sector marca la tendencia general y afecta a los valores globales”, asegura la responsable de Internacionalización de la Cámara. Sin embargo, este sector ha perdido peso específico durante los últimos años, ya que en 2009 suponía un 40% del comercio exterior de toda la Comunidad, frente al 27% del año pasado: “Puede ser un descenso coyuntural, pero es un sector difícil de prever porque, además del mercado, depende mucho de las políticas de las grandes marcas automovilísticas”.

Frente a la caída de la venta de coches en el exterior han crecido otros sectores que, sin tener la importancia del anterior, están apostando por la exportación y aumentando su volumen de negocio de forma significativa. Es el caso de la industria agroalimentaria -liderada por los vinos aragoneses- o los electrodomésticos de línea blanca, que han pasado de aportar 148 millones de euros en 2009 a 549 en 2012, un aumento similar al de los productos textiles. Esta industria y la confección de prendas de vestir ya ocupan el segundo lugar en volumen de negocio, con alrededor de 650 millones de euros, frente a los 246 de hace tres años.

“Está claro que la presencia de Inditex influye, aunque para las exportaciones de la Comunidad solo computan envíos concretos, pero el trabajo que están realizando las empresas textiles aragonesas también empieza a dar sus frutos”, indica Bartolomé Arranz, secretario general de la Federación de Industrias Textiles y de la Confección de Aragón (FITCA), entidad que lleva años promoviendo la presencia en el extranjero de firmas de la tierra: “Con la economía y el consumo nacional hundidos, estamos apostando cada vez más por la exportación e intentando abrir nuevos mercados. Muchas empresas ya están vendiendo fuera el 30 o 40% de su producción”.