SD HUESCA
SD Huesca-Alcorcón: ganar por encima de todo
Los azulgranas reciben este sábado al Alcorcón con la obligación de vencer para dejar atrás a un rival directo.
La película de la supervivencia de la SD Huesca en el fútbol profesional ya tiene a sus actores definitivos después del cierre del mercado. Y el escenario principal es El Alcoraz, por donde pasarán en buena medida las opciones de firmar un final feliz digno de Hollywood. Los azulgranas se agarran a su estadio como fortaleza y refugio por el que en las próximas semanas pasarán varios rivales directos; el primero, el Alcorcón este sábado (16.15, LaLiga TV Hypermotion). Un punto separa a los de Antonio Hidalgo de los alfareros, la delgada línea entre el descenso y la permanencia en estos momentos.
Terminó enero con cinco movimientos: las altas de Elady Zorrilla y Carlos Gutiérrez y las despedidas de Diego Aznar, Abou Kanté y Manu Rico. Un bagaje ajustado a las mermadas posibilidades económicas de la entidad que deja en 23 los efectivos con que Hidalgo podrá contar de ahora en adelante, uno más si se tiene en cuenta al canterano Ayman Arguigue, en la dinámica del primer equipo desde hace semanas. También transcurrió el mes sin victorias, con los empates ante Sporting de Gijón y Villarreal B a domicilio y las derrotas en El Alcoraz frente al Rayo Vallecano en la Copa y el Eibar en la liga.
Un bagaje general que se sustenta en una secuencia irregular, con buenos ratos de fútbol acompañados de otros menos brillantes. El pasado duelo en el Estadio de la Cerámica representó fielmente esta dinámica. Durante los primeros 20 minutos, la SD Huesca alcanzó una versión plena de sí misma para desdibujarse después en una más medrosa e imprecisa. En este momento de la temporada se va a necesitar un funcionamiento al más alto nivel porque el margen de error ha de ser mínimo. Contra el Alcorcón solo vale ganar del mismo modo que en las próximas semanas hay que hacerse con un buen balance de puntos frente a Eldense, Amorebieta, Mirandés y, un poco más allá, Andorra con el paréntesis entre medias de la visita al Espanyol.
Hidalgo ya sabe lo que tiene y lo que hay. Con lo que hay que bregar. Se ha tratado de reforzar el ataque y la defensa y Elady ya dispuso de unos minutos la pasada jornada. No así Carlos Gutiérrez, quien ya está dado de alta en LaLiga y, por tanto, a la expectativa de debutar y, sobre todo, de aclimatarse a su nuevo destino después de cuatro años en Japón y de un periodo de inactividad de tres meses. El preparador dispone de 22 futbolistas con el añadido de Álex Balboa, que ya ha regresado tras participar con Guinea Ecuatorial en la Copa Africana de Naciones y alcanzar los octavos de final. Este viernes no se entrenó con el grupo Ayman, por lo que cabe pensar que competirá con el juvenil o el filial.
Solo faltarán de este modo el lesionado Rubén Pulido y el otro internacional, un Jovanny Bolívar que ha prorrogado su participación con Venezuela en el Preolímpico. Con los matices que pueda aportar la presencia de Elady, la principal duda reside en si Samuel Obeng volverá al once después de su suplencia ante Eibar y Villarreal B, en si la referencia será Joaquín y en si esta situación se resuelve en beneficio de la línea más precaria. Por lo demás, en defensa y en el medio Hidalgo ha encontrado un bloque en el que confía y, en suma, el mercado ha servido para añadir experiencia a un grupo unido ante la adversidad.
Están inmersos los azulgranas en una liga dentro de la liga que atañe en este momento a seis equipos separados por dos puntos. Dentro de este pelotón está subiendo como la espuma un Alcorcón resucitado de la mano de Mehdi Nafti: ha sumado 11 de los últimos 15 puntos en juego para adelantar a la SD Huesca y marcar la permanencia empatado a 25 con Albacete y Villarreal B. De ganar, los de Hidalgo pueden mirar el descenso por el retrovisor y lanzar al resto de implicados el mensaje de que están preparados para la guerra.
