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La cesión de Manu Rico al Ceuta completa los movimientos previstos en el Huesca para el mercado de invierno
El canterano oscense jugará hasta el final de temporada con los norteafricanos, conjunto de Primera RFEF.
De las operaciones que la SD Huesca se había marcado como objetivo dentro del mercado de invierno que finalizará el jueves, era la última que quedaba por resolverse. El club azulgrana ha hecho oficial este martes la cesión de Manu Rico al Ceuta, un movimiento que se daba por hecho desde hace varios días. De hecho el jugador, que ya se ha ejercitado con su nuevo equipo, se había ausentado de los últimos entrenamientos y tampoco había entrado en la convocatoria para el encuentro con el Villarreal B (1-1) del pasado domingo.
Su adiós temporal se une a la rescisión de Kanté finalmente ejecutada el lunes y en la que el club se hace cargo de parte de la ficha que le restaba por percibir al ariete hasta junio y al préstamo de Diego Aznar al filial del Valencia que incluye una opción de compra que será de 250.000 euros si es para quedarse en el Mestalla o de 600.000 si se le hace ficha con el primer equipo. A ellas, hay que añadir la venta al Cuiabá brasileño por 150.000 euros de los derechos que se conservaban de Pitta y el traspaso al Yverdon suizo por 250.000 euros de Kevin Carlos, que ya estaba jugando allí cedido desde verano.
En el apartado de entradas ha habido dos, las del delantero Elady y el central Carlos Gutiérrez, ambas selladas una vez conseguido el hueco necesario en el límite salarial. Las estrecheces económicas son las que hicieron que el lunes en la presentación de Elady el director deportivo Ángel Martín González diese a efectos prácticos por cerrado el mercado de invierno para el Huesca. De aquí a su bajada de persiana final el jueves no se quiere que haya más cambios, aunque hay jugadores que podrían recibir propuestas como Rafa Tresaco. La aceleración que el zoco acostumbra a vivir en sus últimas horas hace que hasta el final nada se pueda considerar definitivo.
Martín González ha atendido a las peticiones hechas por Hidalgo, se encuentra satisfecho con la composición de la plantilla que va a tener que pelear por la salvación y está esperanzado en que se logrará. "Los jugadores me da la sensación de que ahora están disfrutando en el campo, tienen el balón, hacemos muchas cosas bien y eso se irá reflejando poco a poco en la clasificación", opinó el lunes en la presentación de Elady.
Manu Rico, oscense de 22 años, se marcha en busca de los minutos que no estaba teniendo con el primer equipo azulgrana en lo que se entiende un paso más dentro de su formación como futbolista. El objetivo es que gane expèriencia. Recala en un conjunto de Primera RFEF, competición hacia la que había puestos sus preferencias, que marcha noveno en el gupo II por lo que no coincidirá ni con el Tarazona ni con el Teruel, los dos representantes aragoneses de la categoría.
La salida ha sido una decisión consensuada con el club. Hidalgo ya se refirió a ella tras el empate en el Estadio de la Cerámica comentando que “necesita jugar”. Al respecto, el técnico catalán solo lo ha empleado en dos jornadas de liga, contra el Andorra y el Cartagena, y en las tres eliminatorias de Copa del Rey. En total, este curso suma 294 minutos en ocho partidos, aunque de ellos 90 corresponden al desplazamiento a Oviedo en el que disputó el choque al completo. Aunque lleva tres en la órbita del primer equipo, la actual ha sido la primera en la que no ha tenido ninguna ligazón con el filial.
Se incorporó al club con once años en 2014 y ha pasado por todas las categorías base hasta que en la 2021-22 debutó en Segunda División. Su contrato con el Huesca se extiende hasta 2025.
Su caso, junto a los de Diego Aznar y Kevin Carlos, se une a otros recientes de productos de la cantera que han hecho las maletas ya sea mediante traspasos, cesiones o no renovaciones. Otros ejemplos son los de Anglada, Euse y Tomeo.
