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Fran Escribá, nuevo entrenador del Real Zaragoza
El preparador valenciano, extécnico de Elche, Villarreal, Getafe o Celta, será el relevo de Carcedo.
Fran Escribá ya es nuevo entrenador del Real Zaragoza, el técnico elegido por Raúl Sanllehí para relevar a Juan Carlos Carcedo a los mandos del Real Zaragoza. Las negociaciones con el preparador valenciano quedaron cerradas en la tarde de este lunes una vez que se terminaron de acordar las condiciones de su contrato y de sus colaboradores.
Escribá, que ha llegado este lunes por la noche a la capital aragonesa, se hará cargo del vestuario zaragocista con un contrato que le vincula para lo que resta de temporada y otra adicional. Desde la tarde y la noche del domingo, en Madrid, se han producido diferentes gestiones para convencer a Escribá que se haga cargo del equipo aragonés. Unas gestiones que se prolongaron ayer entre los dirigentes del Real Zaragoza, con Raúl Sanllehí como interlocutor, y Manuel García Quilón, representante del técnico.
Aunque el director general del Real Zaragoza ha manejado una lista con más nombres, Fran Escribá se posicionó rápido como la opción preferida de la nueva propiedad del club, y hacía ese frente se volcó el esfuerzo negociador desde las últimas horas del domingo.
Escribá vivió su última experiencia al frente de un equipo el pasado curso, en el Elche, donde fue destituido en noviembre de 2021. Allí, su segundo entrenador fue David Generelo, afincado en Zaragoza, donde jugó durante buena parte de su carrera como futbolista, aspecto que ha corrido a su favor para que siga vinculado al técnico valenciano. Julen Masach, preparador físico en la Real Sociedad, completará el cuadro técnico. Masach fue uno de los ayudante de Unai Emery y Juan Carlos Carcedo en el Arsenal en el que ejercía Raúl Sanllehí.
Antes de esa segunda etapa en el Elche en Primera División, Fran Escribá dirigió a Celta, Villarreal y Getafe, dentro de una carrera en solitario que había arrancado también en Elche tras varios años como segundo entrenador de Quique Sánchez Flores.
De 57 años, representa una opción de cierto cartel, con experiencia, y buena consideración dentro del fútbol español. Lleva prácticamente diez años metido en la rueda de entrenadores de Primera División. El Zaragoza quiere, aquí, una apuesta más firme, de mayor recorrido, que la que hasta ahora era Carcedo, despedido el pasado domingo de la mano del director deportivo Miguel Torrecilla.
Jugador de la cantera del Valencia, fue allí, en el conjunto che, donde comenzó su andadura como técnico en su equipo alevín. Pronto se ligaría a Quique Sánchez Flores como ayudante principal, con quien estuvo en el Getafe, el propio Valencia, el Benfica y el Atlético de Madrid, donde consiguió la UEFA Europa League y la Supercopa de Europa. Después de la salida de Quique del club colchonero; Escribá decidió emprender, en 2011, su carrera en solitario.
Fue en el Elche, en su primera experiencia, donde firmó la proeza de ascender a los ilicitanos siendo líderes desde el principio hasta final de la temporada 2012-2013, con la mejor primera vuelta de la historia de Segunda (49 puntos de 63 posibles). Al Elche, lo mantuvo dos temporadas en Primera, pero en 2015 fue descendido por cuestiones económicas y administrativas, y Fran Escribá dejó el club.
Luego, se fue al Getafe, donde no acabaría la temporada, antes de comprometerse en 2016 con el Villarreal como relevo de Marcelino. Allí, clasificó quinto al Submarino Amarillo, aunque al inicio de la siguiente campaña fue destituido por los malos resultados. Después de año y medio, su siguiente etapa fue el Celta de Vigo, club que recurrió a él para intentar la permanencia.
Lo consiguió en el tramo final del curso 18-19, pero en noviembre de la siguiente campaña una crisis de resultados se lo llevó por delante. En febrero de 2021, regresó al Elche, un equipo hundido que buscó un golpe de timón con uno de los técnicos más admirados en la ciudad. Escribá lideró la salvación, pero, de nuevo, al siguiente curso, hace un año, fue destituido.
Es un técnico que suele sacar rendimientos en situaciones difíciles. Su estilo de juego prioriza la pelota, pero es un entrenador que maneja varios registros. Su esquema más usado es el 4-4-2, pero en su carrera se ha adaptado a plantilla de perfiles muy distintos. Ya en 2020, Escribá estuvo muy cerca de firmar por el Zaragoza, después de entrevistarse con Lalo Arantegui, pero el candidato elegido resultó finalmente Rubén Baraja.
