Jair Amador confirmó este martes las negociaciones para su renovación puestas en marcha por el Real Zaragoza entre los días finales de septiembre y los primeros de octubre y reconoció estar bien encaminadas para la firma de un nuevo contrato. El central hispanoportugués finaliza su actual vinculación el 30 de junio de 2023, al finalizar la temporada, y, de culminar las gestiones en las próximas semanas, podría extenderla dos campañas más. "Estamos en contacto, hablando. De momento la cosa va bien, pero no puedo decir más. No es el momento de hablar de la renovación ni le doy importancia. Estoy contento aquí pero cuando haya que decidir, decidiremos que es lo mejor para mí", admitió el futbolista.

Las posturas entre ambas partes están bien encaminadas, aunque los términos del acuerdo siguen en discusión entre Raúl Sanllehí y la agencia de representación del jugador. Jair, como él mismo aseguró en rueda de prensa, ha dado la directriz de que la continuidad en el Zaragoza debe ser la prioridad, especialmente, por temas familiares. "Me siento muy feliz aquí, igual que mi familia. Me gustaría seguir más temporadas", recalcó.

Su renovación es una prioridad para el club, que le trasladó hace unas semanas la primera oferta formal. Raúl Sanllehí, de acuerdo a los informes técnicos elaborados por la dirección deportiva, considera a Jair una pieza básica del proyecto, de ahí el movimiento emprendido para retenerlo, pues a partir del 1 de enero, al entrar en los seis meses finales de su contrato, Jair está liberado para firmar con cualquier otro equipo. Pese a sus 33 años, el central presenta parámetros físicos destacados. Apenas ha tenido contratiempos de lesiones más allá de aquellos problemas que lastraron sus primeros días en el Real Zaragoza. Esto, unido a su jerarquía y solvencia, hacen que el club haya valorado en positivo su continuidad, como un defensor de alto nivel para la Segunda División.

Apoyo a Carcedo

Jair también aprovechó para repasar otras cuestiones de actualidad, como el apoyo de la plantilla al entrenador representado en la piña que formaron los jugadores con Carcedo en el partido contra el Villarreal B. “El significado fue muy claro: con el míster y con el cuerpo técnico. Estamos muy ilusionados con el trabajo que nos transmite y queremos seguir así”. El defensa admitió que entiende la tensión generada en torno a la figura del técnico ante la falta de victorias. “La afición está en su derecho de opinar y transmitir su sentir. Más allá de eso, nosotros seguimos con la idea de trabajar y somos una piña toda la plantilla junto con el staff. Los aficionados son libres de opinar, nosotros seguiremos trabajando”, explicó.

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Gueye asoma la cabeza

Después de un cuarto de liga ya superado, Jair apuntó su balance. “A nivel individual, hasta las molestias, lo estaba jugando todo, con buenas sensaciones, aunque alguna vez tienes mejores o peores partidos. Siempre se pueda dar más y esa era la idea. A nivel colectivo, estamos siendo un poco irregulares, trataremos de mejorar eso para estar más arriba”.

El defensor espera que los dos próximos partidos impulsen al equipo pese a la dificultad y jugar fuera de casa. "Está claro que son dos encuentros importantes, sobre todo el primero, el de Granada, que es en el que hay que estar enfocados. Será un partido muy duro que nos exigirá dar el máximo. No hace falta decir el nivel que tienen ni el objetivo que tienen, ya que acaban de descender. Nosotros queremos seguir en la buena dinámica y tratar de ser más regulares". señaló un Jair que busca el gol también en las acciones de balón parado: "Tengo la espinita del gol pero no por mí a nivel individual, sino porque quiero aportar un poquito en la parte ofensiva y ayudar a mi equipo con goles. Sí que tengo la espinita y además me gustaría que fuera en casa porque sería muy bonito delante de la afición que tenemos", concluyó.