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Los test médicos lanzan al Real Zaragoza 20-21 tras solo 15 días de vacaciones
La plantilla, todavía en fase de reconstrucción, retornó a la Ciudad Deportiva este lunes 31 de agosto para iniciar la pretemporada más extraña, anómala y extemporánea de toda la historia del club.
Se acabaron las vacaciones para los futbolistas, técnicos y auxiliares del Real Zaragoza. Al menos para la mayoría de ellos, pues algunos jugadores ya vienen entrenándose en solitario o en grupo reducido desde hace 8 días. El cuadro aragonés cayó eliminado por el Elche en la noche del día 16 de este agosto y, hoy, el 31, ya ha debido volver de nuevo al tajo, apresuradamente, pues las exigencias de La Liga (LFP), que quiere empezar el nuevo curso 2020-21 el día 12 de septiembre (en menos de dos semanas), no dejan lugar a que las vacaciones sean de mayor dimensión para los clubes que acabaron más tarde de lo normal (por causas ajenas a su voluntad y de exclusiva responsabilidad de la LFP).
Los jugadores y el cuerpo técnico del Real Zaragoza se han sometido a las pruebas médicas -serológicas y de PCR- a lo largo de toda la mañana de este lunes en las instalaciones de la Ciudad Deportiva. Un episodio largamente repetido durante los precedentes meses de junio y julio y que les es muy común a todos los protagonistas. Es el paso previo para el reinicio de los entrenamientos, que durante las próximas 4 semanas darán forma a este inédito periodo de precampaña, en pleno septiembre y con muchas cuestiones básicas por definir en el vestuario.
El Real Zaragoza sabe que empezará la liga con 2 semanas de demora respecto de la mayoría de rivales. Es el 'favor' que la LFP hace a quienes acabaron la Promoción con un enorme retraso respecto de lo programado a consecuencia del lío originado en el final de la liga de Segunda tras la última jornada liguera, la suspensión del partido Dépor-Fuenlabrada, el conflicto multibanda que estalló tras esa decisión y la demora de casi 3 semanas en poder disputarse los 'play off' de ascenso. Su incorporación al torneo será en la 3ª jornada, en el fin de semana del 26-27 de septiembre.
Con la notable ausencia del nuevo entrenador, Rubén Baraja, precisamente aquejado de covid-19 según reveló un test la semana pasada, así como de sus colaboradores José Rodríguez y Manuel Poblaciones (no positivos pero aislados en los últimos días), el Real Zaragoza se pone en marcha de nuevo de cara a un año que se presenta en el horizonte repleto de incógnitas, tanto en lo particular como en el ámbito general de la competición.
Desde hoy, lunes 31 de agosto, el grupo de futbolistas y técnicos del Real Zaragoza siguen a rajatabla, como antes de sus breves vacaciones (a las que les falta una semana según el convenio firmado por el sindicato AFE hace muchos años), el estricto protocolo sanitario marcado por los servicios médicos del club y de la propia LFP. Se repiten pues las imágenes, de jugadores con mascarillas, de tomas de temperatura a la llegada a la Ciudad Deportiva, de llegada escalonada en sus coches al recinto, de la imposibilidad de ducharse ni utilizar los vestuarios (han de ir cambiados desde casa y marcharse a sus domicilios a ducharse)... sigue vigente el fútbol de mentira, sin que los protagonistas puedan tener contacto directo más allá de lo que dice el juego, ahora solo simulacros.
