“La sentencia del caso Levante-Zaragoza deja al descubierto a quien atacó el club”. Esas fueron las palabras precisas que eligió Christian Lapetra, presidente del Real Zaragoza, para clausurar la rueda de prensa posterior a la Junta General de Accionistas celebrada en la mañana de este martes en la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza. Con unas cuentas favorables aprobadas por unanimidad pese a estar subyugado a los rigores de la Segunda División, Lapetra cerró su comparecencia refiriéndose a la sentencia absolutoria para el Real Zaragoza y su empleado (Paco Checa) y condenatoria para dos exconsejeros de la entidad aragonesa, Agapito Iglesias y Javier Porquera.

Lapetra también había dedicado el prólogo de la Junta de Accionistas a la sentencia, dada a conocer apenas 24 horas antes del cónclave accionarial zaragocista. En sus palabras, el presidente apuntó la posibilidad de tomar medidas legales contra quienes hayan atentado contra los intereses del equipo del león rampante. “El juez dice que no hay base. El club, por su parte, una vez que estudie la sentencia, si así lo consideran los servicios jurídicos, tomará las medidas oportunas pensando siempre en los intereses del club. La imagen del club ha sido vilipendiada y puesta por los suelos”, apuntó, para después concretar: “Nos gustaría que quienes han usado al club en su detrimento y por este procedimiento, al menos tuvieran la valentía o la necesidad, de compensarnos”.

Entre la serie de medidas que los servicios jurídicos del club estudiarán, también figura reclamación a los dos condenados, Agapito Iglesias y Javier Porquera, de los daños que pudieran haber causado al club aragonés, de acuerdo la sentencia dictada el pasado lunes.

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