Real Zaragoza 

Una pesadilla aérea

El punto de inflexión de la nueva derrota del Real Zaragoza de Víctor Fernández estuvo en otro gol encajado de cabeza, tras un centro lateral

R.C.D. MALLORCA - REAL ZARAGOZA / 25/03/2019 / FOTO : TOORU SHIMADA [[[FOTOGRAFOS]]]
Pep Biel remata de cabeza en el Mallorca-Real Zaragoza
Tooru Shimada

El Mallorca comenzó a ganarle al Zaragoza el partido en la pizarra, con un juego definido, ordenado, cada pieza ajustada a su función, con una idea colectiva, sabiendo atacar y sabiendo defender… Vicente Moreno es de los entrenadores que hace mejores a sus futbolistas y a sus equipos, y lo confirmó ayer con su planteamiento y su dirección de campo. Sin embargo, como casi siempre en esta categoría, el partido necesitó de los pequeños detalles para abrirse y resolverse. Y, con el Zaragoza de por medio, el juego aéreo se intuyó desde un principio como una llave para el Mallorca, superior sobre el campo, pero pobre de remate, como casi todos los equipos de Segunda.

Al Zaragoza se le vio venir rápido: el rival lo cosía a centros, consciente de su debilidad en esa faceta, como ya hizo el Elche hace una semana, como hizo el Granada, como hizo el Almería… El Zaragoza lleva sufriendo todo el año en eso, pero este defecto se ha acusado en los dos últimos meses. Los rivales ven fragilidad en la defensa de Víctor Fernández en las bandas y hacia allí lanzan sus colmillos, puñales y sus dentelladas.

Cuando ya se rozaba el descanso, el Mallorca rompió el partido. Un centro desde la izquierda lo ganó Raíllo en los cielos. Al Zaragoza se le reducen los análisis de su defensa aérea a los centímetros en una mirada somera, sencilla. Hay mucho más. Raíllo, con su 1,85, se impuso a Álex Muñoz, un mocetón de 1,84 y a Carlos Nieto y su 1,80, que no es una medida de jugador de NBA, pero es suficiente. Más que una cuestión de anatomía el problema es más profundo, de mecanismos defensivos, de concentración e incluso de facilidades a la hora de dejar centrar a los adversarios. Las tres últimas derrotas del Zaragoza se han desencadenado en el aire.

El Almería le marcó los dos goles en sendos cabezazos, el Granada hizo bueno un remate de Germán en un saque de esquina… Y ayer el Mallorca insistió e insistió: centros, centros y centros. Del mismo modo que se le había apreciado al Elche hace una semana, en este caso, sin gol, como si los equipo tuvieran rotundamente detectada la grieta del Zaragoza y una consigna irrebatible para castigarla.

El Real Zaragoza volvió a comenzar a perder así, en la defensa aérea. Nunca dio sensación de poder ganar al Mallorca, pero podía perder si no controlaba esos pequeños detalles, como dejarse encajar un gol de cabeza en el minuto 47 de la primera parte. Con el 1-0, todo pareció mucho más difícil. El 3-0 final, abultado y excesivo, se explica con la expulsión, evitable, de Carlos Nieto. La roja pulverizó al Zaragoza, que encajó los dos últimos goles en inferioridad, totalmente rendido.

«Es indiscutible que los despistes nos penalizan mucho. En los dos primeros minutos el Granada nos sacó córneres, faltas y nos remató a placer», alertó Víctor Fernández tras la derrota en Granada. Desde entonces, la vida sigue igual y los problemas, sin solución.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión