Después de tres años de nervios invernales, revoluciones en el vestuario y remontadas milagrosas, el Real Zaragoza encara la segunda mitad de la Liga con moderada tranquilidad. En la decimotercera posición, con 22 puntos y a cinco del descenso, comienza el equipo de Jiménez la nueva vuelta del calendario. Lo hace visitando Valladolid (domingo a las 17.00, Canal+L/GolT) en un duelo directo en el que debe resarcirse de las dos últimas derrotas ligueras sufridas ante Betis y Atlético.

Sin agonías, pero sin caer en exceso de confianza, el club debe confirmar la mejoría en una segunda vuelta en la que tendrá que conseguir al menos los mismos puntos sumados hasta ahora. Un reto que parece bastante más factible que el que se presentaba el año pasado a estas alturas, cuando el Real Zaragoza ocupaba la última posición con tan solo 12 puntos.

Sin embargo, el club afronta la reválida con deberes pendientes tanto en el terreno de juego como en los despachos. En lo futbolístico, la principal preocupación de Manolo Jiménez es recuperar el pulso en La Romareda, donde en la primera vuelta han perdido seis encuentros de Liga y solo han logrado tres victorias. Por el estadio zaragocista pasan buena parte de las opciones de salvación, a pesar de que la afición blanquilla espera visitas poco agradables. Barcelona (14 de abril), Real Madrid (31 de marzo), Atlético (1 de junio) y Valencia (24 de febrero) pasarán por la capital aragonesa de aquí al final de la temporada.

Con mejores sensaciones como visitante, el partido del José Zorrilla se presenta como una buena oportunidad para sumar tres importantes puntos, restárselos a un teórico rival directo y, si es posible, ganarle el 'gol average' particular tras la victoria del Valladolid en La Romareda (0-1) en el primer partido de Liga. Para cerrar el mes, y con la vuelta de los cuartos de Copa del Rey por el medio, el Real Zaragoza recibirá al Espanyol de Aguirre, otro rival directo por la salvación.

Jiménez quiere refuerzos

En los despachos está la segunda preocupación de Manolo Jiménez, que pasa por reforzar la plantilla antes de que cierre el mercado de invierno para afrontar con más garantías la segunda vuelta. Tras la deserción de Aranda, el técnico andaluz pide al menos dos delanteros para reforzar la punta de ataque zaragocista, formada únicamente por el internacional portugés Hélder Postiga.

Al menos ya ha llegado el primer refuerzo para la defensa, el lateral derecho José Manuel Fernández, que llegó este jueves a la capital aragonesa procedente del Córdoba. El joven jugador, de solo 23 años, es la solución a parte de los dolores de cabeza de Jiménez, que cuenta con numerosas bajas en la zaga y a lo largo de la primera vuelta ya se ha visto obligado a improvisar la línea defensiva en más de una ocasión.