El cuentakilómetros del Levitec Huesca se pone en marcha este viernes para afrontar la que será su décima temporada consecutiva en la LEB Oro, segundo peldaño del baloncesto nacional. La primera parada de los oscenses se encuentra en la cancha del Cáceres, donde los extremeños les aguardan a partir de las 21.00. Después llegarán otras 33 jornadas con la obligación de evitar el descenso y con la tentación de soñar con cotas más altas. Ya en el curso anterior se coqueteó durante la primera vuelta con el primer puesto y en la segunda con el ‘play off’, pero finalmente y, a pesar de batir su récord de victorias, hubo que conformarse con la décima posición.

A los mandos de la nave continúa el técnico Guillermo Arenas, aunque la tripulación que maneja es sustancialmente distinta. Ya no están jugadores clave como Gjuroski y Nurger, que tanto hicieron disfrutar al Palacio de los Deportes. De hecho, solo siguen el base Dani García y el alero Diego de Blas. A ellos se les han unido otras diez piezas que conjugan juventud y experiencia en la categoría.

De la cantera del Estudiantes se han incorporado el escolta Tamayo y el alapívot ucraniano Grytsak, y del Casademont Zaragoza el alero Urdiain. Directamente desde la NCAA, la liga universitaria estadounidense, dan el salto el exterior Carter y el interior Skara.

Junto a Dani García la dirección de juego será también cosa de Berni García, llegado la semana pasada y que se estrena en la categoría tras los buenos números logrados en Ávila en la LEB Plata, y de Fran Cárdenas, al que una lesión no le ha permitido completar la pretemporada con normalidad y cuyo último destino fue el Oviedo. Como él, también saben ya lo que es la LEB Oro el alero Dedovic (Araberri) y el pívot Vucetic (Melilla). Además se cuenta en la zona con el lituano Grabauskas, que en el último curso compitió tanto en su país como en Alemania.

"Quizá estemos ahora un peldaño por debajo del año pasado, pero este equipo no ha acabado su construcción y quedan pasos por dar", reconoce el técnico, quien, sobre la competición considera que "los conjuntos de arriba han dado un salto de calidad y de presupuesto".

Como favoritos al ser recién descendidos parten el Breogán y el Gipuzkoa. Solo el primer clasificado llegará directo a la ACB, entre el segundo y el noveno se disputarán en la postemporada la otra plaza de ascenso y los tres últimos descenderán.