Refu Family, el programa que promueve el senderismo en familia desde los refugios del Pirineo
La Federación Aragonesa de Montañismo gestiona esta iniciativa para iniciarse en las caminatas de montaña con niños.
Vivir la montaña en familia, con niños y de forma segura es posible a través de Refu Family, un programa impulsado por la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM) para facilitar la iniciación al senderismo en montaña con los más pequeños de la casa. Así, el objetivo de esta propuesta es tomar contacto con la naturaleza desde distintos refugios que hay en el Pirineo aragonés y que están gestionados por la FAM.
De esta manera, además de promover el senderismo en familia, se da a conocer el entorno de los refugios y quienes los visitan pueden experimentar cómo es la vida en estos espacios, a menudo ubicados en lugares recónditos. Además, estar en contacto con la naturaleza aporta beneficios a niños y adultos tanto en la salud como en su capacidad de atención, en el desarrollo motor y cognitivo, en autonomía o en seguridad.
La puesta en práctica del programa consiste en la edición de nueve folletos, que se pueden descargar en la página web de Montaña Segura, y que recogen información detallada sobre nueve rutas. También incluyen pasatiempos y una sección de consejos. Cada propuesta sale desde un refugio. Siete de ellos están en el Pirineo: Lizara (Aragüés del Puerto, La Jacetania), Casa de Piedra (Balneario de Panticosa, Alto Gállego), Pineta (Bielsa, Sobrarbe), La Renclusa y Benasque (La Ribagorza), Riglos (Hoya de Huesca) y Alquézar (Somontano de Barbastro). Los otros dos son el de Morata de Jalón (Valdejalón) y el de Rabadá y Navarro (Camarena de la Sierra, Gúdar-Javalambre).
Al proponer tres alternativas desde cada refugio, se pueden realizar rutas de menor o mayor nivel, según la experiencia y característica de la familia, la edad de los niños o las condiciones físicas que tengan. Así, hay desde recorridos circulares de menos de una hora y media de duración, como uno por la pradera de Pineta, hasta otras opciones más exigentes, como la subida al Puntal Alto del Foratón desde el refugio de Lizara (más de tres horas y media de actividad).
En cada folleto se puede ver, por una cara, un mapa de la zona los tres recorridos y, por la otra, información detallada, con indicaciones a tener en cuenta conforme se hace la ruta. Los juegos que se incluyen tienen como finalidad que los niños y niñas interactúen con la actividad y la naturaleza. Por último, se comparten las señales internacionales de socorro y una serie de teléfonos de interés, como los de los refugios de la FAM, que están guardados durante todo el año.
Pedir ayuda a los guardas
Aprovechando el programa Refu Family, desde la FAM recuerdan que en sus refugios existe la figura del guarda, cuyo papel no es solo cuidar el lugar, dar de comer a los visitantes o hacer su estancia más agradable. También pueden ayudar a todo aquel senderista que pasé por allí y tenga una emergencia, ya que disponen de teléfono y estación base de radio para recibir o emitir avisos al 112. Además, como conocedores del terreno, aconsejan a quienes van por la montaña sobre las mejores opciones según las características del grupo.
También disponen de información sobre el estado de la nieve de las rutas, en los meses de invierno; mantienen en buen estado las webcams que permiten ver el entorno de un refugio en tiempo real; y prestan especial atención a las personas que van solas.
Refu Family es una iniciativa que la Federación Aragonesa de Montañismo lanzó en 2018 para que quienes no son practicantes asiduos de los deportes de montaña descubran todo el atractivo del senderismo y sus posibilidades para practicar ejercicio, disfrutar de la naturaleza de Aragón y realizar actividades en familia.
Con este fin, con la colaboración de Montaña Segura, nace Refu Family, que cinco años después sigue promoviendo las amplias posibilidades para realizar rutas senderistas con niños en el entorno de los refugios de montaña de los Pirineos y otros gestionados por la FAM.
