El futuro de la depuradora de La Cartuja, pendiente del nuevo marco legal

El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, asegura que se está trabajando "en diferentes escenarios" junto a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).

La depuradora de La Cartuja está llegando al final de su vida útil.
La depuradora de La Cartuja está llegando al final de su vida útil.
Guillermo Mestre

El futuro de la depuradora de La Cartuja no se despejará "hasta que no haya un marco legal definitivo", según avanzó ayer el concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano.

El inminente final de su vida útil hará que el Consistorio deba asumir una inversión millonaria. El problema, dijo el edil, es que la decisión estará "muy condicionada por el futuro de la legislación en esta materia". "Se introduce la obligación de tratar nuevos contaminantes emergentes como los derivados de la industria farmacéutica o cosmética y todo lo que tiene que ver con la regulación de los microplásticos. Hay aspectos por determinar, y es difícil trabajar si no lo están", reconoció.

Pese a todo, avanzó que se está trabajando "en distintos escenarios". De acuerdo con Serrano, se está actuando "mano a mano" con la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), y se están estudiando "nuevos modelos más eficientes que permitan la generación de energía sostenible en el proceso depurativo" de las aguas. En este sentido, recordó que en 2024 se invertirán 1,5 millones de euros para "mantener el buen nivel de los equipamientos" según los estándares marcados por la Unión Europea (UE).

Todo esto, sin embargo, no evitó las críticas de la oposición. El socialista Horacio Royo aseguró que el Ayuntamiento va "muy tarde" y "no tiene ningún proyecto encima de la mesa". "Si queremos tener una depuradora en seis años debemos correr mucho, y ni siquiera hemos empezado a calentar", manifestó.

Polémica en el Picarral

Serrano también se refirió a la propuesta de construcción de una depuradora por parte de la empresa Tereos en el Picarral. El concejal de ZEC Suso Domínguez expresó sus "dudas" al respecto; unas inquietudes que, según dijo, comparten "gran parte de los vecinos del barrio" por los "problemas de salud" que podría ocasionar. "Este pasado fin de semana, más de cien personas se concentraron por este motivo", apuntó.

En respuesta, el titular de Urbanismo e Infraestructuras remarcó que en la memoria del proyecto se asegura que la planta tendrá el "mínimo impacto" en el entorno en materia de malos olores y que las instalaciones serán "inaudibles" desde los edificios más próximos. Además, avanzó que la propuesta contempla una nueva zona verde "a modo de filtro o frontera entre ambos usos".

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