Aprobados 76,3 millones para conservar y explotar 483 km de carreteras en Zaragoza

Se enmarcan en el programa de mantenimiento de la Red de Carreteras del Estado de Mitma para garantizar las condiciones de circulación, vialidad y seguridad.

Maquinaria del Mitma preparada para las obras
Maquinaria del Mitma preparada para las obras
Mitma

El Consejo de Ministros ha autorizado este martes la licitación de dos contratos para la conservación y explotación de sendos sectores de la Red de Carreteras del Estado en la provincia de Zaragoza por un presupuesto total de 76,3 millones de euros (IVA no incluido), y 483 kilómetros, de los que 117,5 son de autovía.

Las duración en ambos casos es de dos años, con posibilidad de una primera prórroga por tres y otra adicional de un máximo de nueve meses.

Según informa el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) el contrato para el sector número 1, con un valor estimado de 44,3 millones, actuará sobre 286 kilómetros, que incluyen 45 de autovía, en las carreteras A-2, A-68, N-2, N-2A, N-211, N-232, N-232A y Z-40.

Incluye además dos proyectos específicos de pequeñas obras de mejora de la red con la rehabilitación del firme en la autovía A-68, entre los kilómetros 230 a 232,530 y la construcción de glorieta en la carretera N-2. Por su parte, el contrato para el sector número 3 asciende a 32 millones y afectará a 197 kilómetros, de los que 72,5 son de autovía.

Se llevará a cabo en las carreteras A-23, A-68, N-121, N-122, N-122A, N-125, N-232 y N-330, y el contrato incorpora también dos proyectos específicos de pequeñas obras de mejora: la rehabilitación del firme en la carretera N-330, entre el final del tramo cedido de Zuera y el límite de la provincia de Huesca; y la rehabilitación del firme en la carretera N-122 en el tramo comprendido entre Tarazona y el límite de la provincia de Soria.

El nuevo modelo de contratos persigue ofrecer un servicio integral de movilidad al usuario, mejorar el estado de la carretera y red, y optimizar los recursos públicos.

A través de ellos se realizan trabajos de ayuda a la vialidad y conservación ordinaria, para permitir que "la carretera y sus elementos funcionales dispongan de las mejores condiciones de vialidad y seguridad posibles", incluyendo actuaciones como: vigilancia y atención accidentes e incidentes, vialidad invernal, servicio de control de túneles y comunicaciones, mantenimiento de instalaciones, establecimiento de inventarios y reconocimiento del estado de la vía, agenda de información de estado y programación, ayuda a explotación y estudios de seguridad vial, y mantenimiento de los elementos de la carretera con adecuados niveles de calidad.

Con este nuevo modelo se refuerza la orientación hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con los que está comprometido el Mitma.

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