flora en aragón

Zaragoza, capital de las capitanas: qué son y por qué se ha multiplicado su presencia

El clima y el viento de la capital aragonesa se han convertido en los aliados de esta planta arbustiva, habitual de suelos esteparios cuya floración es un quebradero de cabeza para los alérgicos.

Capitana.
Capitana.
K. U.

A veces, caminar por Zaragoza puede ser como una película del oeste. Durante uno de los frecuentes días de viento, algunos esperamos ver a John Wayne paseando por las riberas del Ebro entre rodantes arbustos impulsados por el viento. Estas plantas, las capitanas se encuentran entre las más comunes de la capital aragonesa y son viejas conocidas de quienes sufren de alergia al polen. Bajo el nombre científico de 'salsola kali', la capitana es una planta que alcanza el metro de altura, habitual de los suelos esteparios. Este arbusto crece bien en suelos secos y es capaz de soportar grandes variaciones de pH y de temperatura por eso, ha encontrado en Zaragoza un medioambiente ideal para crecer.

Las capitanas están consideradas una 'mala hierba'. Pueblan caminos y terrenos removidos y, junto a esta variante, hace unos años se instaló en Zaragoza su prima de origen soviético ('salsola kali tagus') o cardo ruso que tiñe de rosa las riberas de los ríos de la capital. Esta planta, al igual que muchos arbustos de clima árido, es una verdadera superviviente que ha en el cierzo a un detonante para su expansión.

salsola
La capitana medra a gusto en la estepa aragonesa
Pablo Alberto Salguero Quiles

Sus semillas sobreviven décadas

El cardo ruso y la capitana expulsan miles de semillas que sobreviven decenas de años bajo tierra hasta que encuentran la luz, la humedad adecuadas para germinar. Cuando se remueve el terreno o se realizan trabajos en un solar, la planta resurge de nuevo. Así que no es de extrañar que las obras que se llevaron a cabo en Zaragoza en 2008 con motivo de la Expo, sacaran a la luz millones de semillas que llevaban mucho tiempo esperando a florecer.

El viento como aliado

El cierzo es uno de los mejores aliados para la capitana. Su estrategia de reproducción cuenta con el viento como elemento diseminador. La planta se desprende de la parte aérea y rueda impulsada por las rachas de aire para diseminar sus semillas durante más terreno. Por eso no es sorprendente ver a esas plantas dando vueltas por las aceras de la ciudad como en una escena de 'El bueno, el feo y el malo'.

Una de las plantas que causa más alergias

Los parques de la ribera del Ebro, los cauces del Huerva, Gállego y el Canal Imperial se visten de rosa en primavera con la floración de este arbusto y los alérgicos notan su presencia a partir del mes de mayo cuando arranca la floración. De hecho, las capitanas se encuentran entre las plantas que más alergias provocan a los zaragozanos. 

Su gran abundancia incide en los niveles de polen que mide la estación aerobiológica del Colegio de Farmacéuticos. Desde mayo a octubre se detectan altos niveles de esta planta, pero los picos más altos coinciden con los meses más calurosos del verano: julio y agosto. Además, aquellos que también sufren alergia al olivo o a las gramíneas pueden sufrir casos de reacción cruzada con el polen de las capitanas. 

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