Zaragoza
La residencia de Pontoneros abrirá en septiembre de 2023 con 165 plazas
Los 212 alojamientos restantes, hasta completar los 377 que tendrá el complejo, estarán a principios de 2024. El Ayuntamiento y Xior colocan la primera piedra.
Tras 12 años de intentos fallidos de recuperar el antiguo cuartel de Pontoneros, el viejo edificio militar inicia el camino para transformarse en una residencia con capacidad para 377 estudiantes. De estos, 165 estrenarán la primera fase del proyecto en septiembre de 2023, con el inicio del curso universitario. El resto, 212 plazas, se inaugurarán a principios de 2024. Pero además de servir de alojamiento, la operación, que supone la inversión de 29 millones de euros por parte de la empresa contratista –Xior Student Housing–, quiere ser una palanca de dinamización de esta zona del Casco Histórico.
El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y el director de Inversiones y director general de la Península Ibérica de Xior Student Housing, Bastiaan Grijpink, han colocado este martes la primera piedra del proyecto. En concreto, han enterrado una cápsula del tiempo con monedas, fotografías, mapas, prensa del día y baldosas del antiguo edificio y restos arqueológicos. Allí ha estado también el rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral, dado que el inmueble reservará 12 apartamentos para investigadores y estudiantes de postdoctorado, y la concejal de Vivienda, Carolina Andreu.
Azcón ha recordado que el edificio es propiedad municipal desde 1972 y «los atascos burocráticos» que ha sufrido este y otros proyectos en el pasado. Ha explicado que «la fórmula de éxito» del proyecto puesto en marcha ahora ha sido la colaboración público-privada. «Entre todos y en tiempo récord hemos conseguido acabar con años de olvido», declaró.
El regidor ha destacado que la propuesta arquitectónica «es espectacular» y respeta «al máximo esta joya del patrimonio». Además, añadió, incorpora medidas de eficiencia energética que permiten ahorros «de hasta un 50%». «Este espacio va a ofrecer alojamiento y a dinamizar el corazón de la ciudad», apuntó.
Servicios abiertos al barrio
Todos han destacado que el proyecto incorpora servicios para el barrio. «Revitalizará esta zona. Será un espacio abierto a los vecinos, un lugar de encuentro para el ocio y la cultura, desde el respeto a su esencia y a su historia», declaró Bastiaan Grijpink, que ha hecho hincapié en el sistema constructivo en madera contralaminada que será «más sostenible».
Entre los servicios previstos figuran aparcabicis, cafetería, salas de estudio, de conferencias, talleres de idiomas y cultura, biblioteca, espacios de ‘coworking’ y cargadores de vehículos eléctricos. Se han proyectado también zonas ajardinadas, solarium y huerto. Uno de los elementos más destacados del proyecto es un nuevo graderío natural al aire libre que se integrará en la plaza de José María Forqué. Será un espacio polivalente para eventos, conciertos, teatro o graduaciones.
En total, se van a emplear dos parcelas con una edificabilidad de 13.500 metros cuadrados, donde se ubican los dos edificios del viejo cuartel, situados a los dos lados de la plaza. En la calle de María Rafols número 4 está el inmueble que estará terminado en septiembre de 2023. El inmueble actual se ampliará con un bloque de nueva construcción para generar un segundo patio. Además, ganará una altura.
En el otro lado de la plaza está la segunda construcción (Madre Rafols 8, 10 y 12), donde estuvieron las viviendas de los oficiales y que está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) se ampliará con dos nuevos edificios a los lados. Esta es la parte que estará terminada en los primeros meses de 2024.
El número total de habitaciones será 337, frente a las 351 previstas en un principio. La reducción obedece a la necesidad de cumplir las prescripciones de patrimonio. Habrá apartamentos de todo tipo (individuales, doble, triples , con baño compartido o con servicios comunes). El precio medio rondará los 548 euros, si bien alrededor de un tercio de las camas costarán unos 377. Habrá diez plazas becadas a coste cero.
