Familias con hijos con necesidades especiales se quedan fuera de centros preferentes TEA

Si el proceso de escolarizar a un niño de 3 años genera preocupaciones y tensiones en cualquier hogar, todavía son más cuando se trata de un pequeño con necesidades específicas de apoyo educativo y que tiene que acceder a una de las denominadas plazas Acenae en un colegio ordinario. Varias familias zaragozanas viven con angustia este fin de semana después de que sus hijos no hayan sido admitidos, para su sorpresa, en centros preferentes para alumnado con trastorno del espectro autista (TEA), a pesar de que había vacantes libres, a la espera de que Educación las adjudique para los escolares con este perfil que no han podido entrar en los centros que habían solicitado en primera opción.

Los afectados, que han presentado un recurso ante el servicio provincial de Educación, denuncian que el departamento incumple lo estipulado en la orden de escolarización del 24 de marzo. Establece que los sitios reservados para niños con autismo que queden libres solo podrán ser ocupados por otros escolares con necesidades específicas de apoyo educativo que dispongan de una resolución de la dirección provincial de Educación en centro ordinario. El problema, explican estas familias, es que Educación las ha blindado a última hora después de que ya hubieran presentado las solicitudes.

Es el caso de Patricia García y Diego Embid, que pidieron plaza para su hijo de tres años en el colegio público César Augusto, en la zona de la Romareda de la capital aragonesa, porque había cuatro vacantes para alumnos Acenae y solo dos inscripciones, una la de ellos. "Si desde el primer momento hubieran dicho que solo eran para niños con espectro autista, como ocurre en el caso de los colegios preferentes para alumnado con discapacidad auditiva o motórica, no nos habríamos decantado por esta escuela", explicaron.

El pequeño padece una enfermedad rara, acidemia metilmalónica, una patología que afecta a su parte cognitiva, a sus movimientos, al habla y la vista. Cuando visitaron colegios para matricularle se "enamoraron" del programa de inclusión y del equipo docente del César Augusto y esperaron hasta el último día para confirmar que iban a quedar plazas libres. Además, comentan, desde el propio colegio les explicaron que no esperaban más alumnos TEA porque el aula específica para ellos ya estaba completa.

Mientras, fuentes de Educación señalaron que, en algún caso, el número de peticiones de plaza de niños afectados por trastornos del espectro autista ha superado las ofertadas. Por ello, ya que los centros preferentes están pensados, en principio, para dar atención prioritaria al alumnado con este tipo de perfil, "se está estudiando la escolarización de este colectivo antes de adjudicar las plazas para el resto de Acneaes en estos centros". El proceso, aseguran, quedará resuelto la próxima semana con la publicación de las listas definitivas.

Educación autorizó este curso el incremento de trece nuevos centros de atención preferente TEA y con ellos ya son un total de 62. El primero de estos colegios se puso en marcha en 2006. La red está coordinada a través de siete equipos de Atención Temprana y el equipo especializado TEA, que se encarga de colaborar y coordinarse con los servicios sanitarios, sociales y entidades concertadas del programa Atención Temprana del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) para valorar la mejor respuesta y formar a la comunidad educativa en todo lo relacionado con este alumnado.