La reforma de la plaza de Salamero llegará hasta la calle de la Morería y César Augusto

El Ayuntamiento de Zaragoza ha dado este martes un nuevo impulso a la reforma de la plaza de Salamero, que se convertirá en un gran espacio de prioridad peatonal. El Área de Urbanismo sacó a concurso al redacción del proyecto, que supondrá un coste de 70.835,72 euros con el objetivo de que esté listo después del verano para iniciar obras a principios de 2022. La obra irá más allá de la superficie de la plaza, dado que se creará una plataforma única en la que quedarán incluidas la calle de la Morería y un tramo de César Augusto, para llegar hasta la iglesia de Santiago, que se podrá observar desde Cinco de Marzo sin interrupciones.

Con los 9.683 metros cuadrados de la plaza patas arriba para ejecutar las obras de emergencia en el aparcamiento subterráneo, ahora el objetivo municipal es acelerar su transformación en un gran espacio en el que la circulación rodada estará restringida. Además de la creación de una gran plataforma peatonal, el proyecto incluye las separatas de las obras que afecten a los accesos (rodados y peatonales) y se dividirá el proyecto en ámbitos de actuación para facilitar la ejecución a poder tener un tratamiento independiente.

La nueva plaza de Salamero dará prioridad al tránsito de los viandantes y a las zonas de estancia. Solo podrán pasar vehículos de emergencia, los accesos al parquin, a los estacionamientos privados de residentes o la carga y descarga. La plataforma de circulación estará al nivel de la acera y solo se podrá transitar a un máximo de 20 kilómetros por hora. Los estacionamientos en superficie quedará suprimidos.

Zonas de actuación en la futura reforma de la plaza de Salamero.

Ayuntamiento de Zaragoza

Se han previsto medidas de eficiencia energética (leds en luminarias, control de sistemas de riego), uso de renovables mediante paneles solares para alimentar los servicios públicos y los cargadores de vehículos eléctricos. Además, se va a apostar por la digitalización, con la inclusión de una zona wifi con tecnología 5G, sistemas de control de accesos a la zona o aplicaciones para gestionar la carga y descarga.

Como la zona cuenta con afluencia de menores de edad a centros de educación, se va a favorecer la creación de caminos escolares. Además la plaza se dotará de mobiliario adecuado para el ejercicio físicos de niños y personas de tercera edad.

La urbanización se adecuará a la edificación protegida que existe en la zona, explicaron fuentes municipales, que explicaron que se tratará de integrar la plaza en los itinerarios culturales de la ciudad. Se podrá analizar la introducción de elementos que hagan referencia a episodios históricos sucedidos en enclaves del área tratada, que evoquen a su pasado y evolución, haciendo uso de los mismos para el desarrollo cultural.

El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, ha explicado que , la futura plaza de Salamero va a ser "un espacio de calidad, digno e innovador que cambiará la fisionomía de la zona y mejorará la calidad de vida de los zaragozanos y, sobre todo, de los residentes, trabajadores y comunidad educativa de la zona".

“En estos momentos, la plaza está en obras de emergencia para renovar la losa superior. De forma paralela, para no perder tiempo, ahora sacamos estos pliegos para obtener un diseño y planificación. Y así, cuando estas fases terminen, estaremos en disposición de emprender las obras de reforma de la plaza y su entorno”, ha resumido Serrano, quien ha destacado “el excelente trabajo de coordinación de todos los funcionarios del área para no demorar en el tiempo un problema que vamos a convertir en una oportunidad para el desarrollo urbanístico y la mejora de la calidad de vida en nuestra ciudad”.

Serrano ha mantenido reuniones a este respecto con los centros educativos del entorno, los colectivos vecinales, las agrupaciones de comerciantes, la FABZ, la Unión Vecinal Caesaraugusta, ECOS y la Junta Municipal del Distrito Centro, entre otros. Asimismo, está previsto impulsar un proceso para que la ciudadanía pueda proponer opciones que se incorporarían al proyecto.