El sector del taxi de Zaragoza reclama ayudas tras perder en 2020 un 75% de la facturación por la crisis

La mayoría de los balances que se hagan del pasado 2020 (si no todos) arrojarán resultados negativos. Los diferentes sectores económicos y sociales han atravesado un ejercicio nefasto debido a la pandemia del coronavirus, la paralización de la actividad y la crisis que ha traído consigo. Los taxistas, cuyo trabajo va de la mano con el funcionamiento de otras muchas áreas, han experimentado una época "muy dura". En Zaragoza afrontan pérdidas en la facturación de aproximadamente el 75%, que no han podido dejar atrás con la llegada del nuevo año. Asumen que seguirá así durante un tiempo, por lo que piden ayudas a las instituciones para poder enfrentarse al temporal.

Han sido unos meses de más altos que bajos. La caída más brusca llegó en marzo con una reducción casi total de los viajes. Tras el periodo de confinamiento se produjo un "pequeño repunte", pero en ningún momento se llegó a remontar por completo. Y la tercera (o cuarta) ola de covid ha llegado acompañada de más restricciones sanitarias que han provocado un nuevo desplome de la actividad. Así lo explica el presidente de la asociación provincial de Autotaxi de Zaragoza (Apatz), Mariano Morón, que calcula que desde el estallido de la pandemia la caída de los ingresos ha oscilado entre el 75% y, en menor medida, el 65%. "Ha sido un año muy difícil y el inicio de 2021 también lo está siendo", lamenta.

"La caída de la demanda y de la recaudación ha sido brutal. Los fines de semana han muerto para nosotros"

"La caída de la demanda y de la recaudación ha sido brutal. Los fines de semana han muerto para nosotros y a partir de las 20.00 con el cierre de bares y tiendas poco se puede hacer", resume. Ante este panorama tan desalentador para el negocio, lo único que pudieron hacer fue pedir al Ayuntamiento que rebajara el número de taxis en la calle al mismo tiempo. Así, de una flota de 1.777 licencias, los días laborables salen 1.065 vehículos (frente a los 1.245 que circulaban anteriormente), y los sábados, domingos y festivos solo 444 (la mitad de los 888 que solían ser antes de la covid). "Y aún así sobramos -incide Morón-. Es la única forma que tenemos de reducir el gasto y hacer un poco más de servicios".

Por eso, desde la Apatz critican a las instituciones por, en palabras del presidente de la entidad, haber tenido respuesta "prácticamente nula" a su delicada situación económica y no atender apenas sus reivindicaciones. En este sentido, el presidente de la entidad recuerda que el Gobierno de Aragón ha destinado los mayores esfuerzos al sector de la hostelería ya que, si bien reconoce que es uno de los más afectados por la crisis derivada de la pandemia, su situación repercute directamente en los ingresos de los taxistas. "Se nos debería tener en cuenta", considera.

Por parte del Ayuntamiento, añade, sí se les ha proporcionado una ayuda, pero ha sido "muy minoritaria". En concreto, el gobierno PP-Cs ha proporcionado a los conductores una bonificación del 25% en la tarifa de transmisión de licencia y del 50% del Impuesto de Circulación. Aunque Morón agradece estas rebajas, considera que se quedan cortas. "Esto al final son 50 euros, poco más que calderilla", enfatiza.

Solidaridad

Frente a todo lo malo, los taxistas también destacan de este último año la solidaridad. Desde el inicio de la pandemia, tal y como recuerda Morón, se hicieron "miles de viajes gratuitos" o a precio reducido para trasladar al personal sanitario a sus puestos de trabajo o llevar a las personas mayores, en colaboración con el Consistorio, a hospitales, centros de salud o farmacias. "A pesar de la complicada situación los compañeros han demostrado mucha solidaridad y se ha hecho un esfuerzo muy grande", asegura.

La acción más reciente fue la recogida solidaria de juguetes que se llevó a cabo, como cada año desde hace diez, en distintos puntos de la Comunidad. En Zaragoza, los taxistas de la plataforma Caravana Verde contabilizan más de 9.000 regalos.