La DGA tendría que retirar 110 licencias de VTC para cumplir con la ratio del reglamento del taxi

Paradas de taxi desiertas, viajeros con maletas esperando a los autobuses urbanos y algún que otro cartel contra la "competencia desleal". Esta fue ayer la estampa en Zaragoza durante la primera jornada de huelga del sector del taxi, que transcurrió sin incidentes pero se dejó notar –sobre todo– en el aeropuerto y en la estación Delicias. Allí, aunque había taxis aparcados, los conductores explicaban que solo prestaban servicio "de urgencia o para desplazamientos de ancianos y discapacitados". Aunque en Zaragoza no se han instalado empresas como Uber ni Cabify, los taxistas de la capital aragonesa decidieron secundar los paros ayer de forma masiva (un 100% de seguimiento, según la Asociación Auto-taxi) en solidaridad con sus compañeros de Madrid y Barcelona.

En Aragón hay 183 licencias de VTC que, de momento, no suponen un gran problema porque la mayoría de estos vehículos (hasta 150, calculan) operan en las provincias limítrofes. No obstante, el sector sí que ve una "amenaza a futuro" y exige que se articule "una regulación que garantice la convivencia entre el taxi y los VTC, mediante el cumplimiento efectivo de la regulación que fija la ley, la que autoriza un vehículo con conductor por cada treinta que se den al taxi".

Examinando los datos de Aragón, se comprueba que hay unas 2.190 licencias de autotaxi en todos los municipios integrados en la Comunidad (aunque ahora la mitad de la flota está de vacaciones), por lo que aplicando la mencionada ratio de 1/30 se arrojaría un número máximo de licencias VTC de 73. Hay que tener en cuenta, además, que hay casi otro centenar de autorizaciones pendientes de las decisiones judiciales porque la administración las consideraba improcedentes y pidió que se informara de forma desfavorable. Con estas cifras, la DGA habría de revocar unos 110 permisos VTC que, en su día, se autorizaron legalmente.

Autónomos y multinacionales

El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, explicaba ayer que "el responsable de la actual situación es el gobierno central, que en 2009 decidió liberalizar el sector". "Aún estamos pagando las consecuencias de aquella decisión, pero el Gobierno de Aragón siempre ha mostrado su defensa nítida del sector del taxi y se ha posicionado en contra del intrusismo y los abusos". Soro confía en que el Ministerio de Fomento "no escurra el bulto" y aclare "jurídica y económicamente cómo actuar", incluso, en el caso de que hubiese que indemnizar a las empresas VTC. El consejero emplaza a la reunión de la Conferencia Nacional de Transportes que se celebrará mañana en Madrid, en la que "cualquier transferencia a las autonomías será bienvenida, pero siempre que venga acompañada de soluciones".

Una opinión semejante es la brinda el gobierno municipal de ZEC, donde recuerdan muestran su apoyo al sector del taxi y lamentan las molestias que los paros puedan estar causando a los usuarios. Explican fuentes municipales que "la única competencia del Ayuntamiento es conceder las licencias y fijar las tarifas", pero insisten en que el taxi "no es un servicio municipal ni lo presta indirectamente el Consistorio, por lo que no tenemos que decretar servicios mínimos", afirmó ayer el concejal Fernando Rivarés.

No obstante, muchos usuarios reclaman a los responsables municipales que se refuerce el transporte público al aeropuerto o que los autobuses que se acerquen a la estación Delicias sean articulados para evitar aglomeraciones. Esta posibilidad estaría sobre la mesa si la huelga se prolongara durante muchos más días. Para el responsable de Economía "el debate no es taxi o VTC, sino autónomos que se ganan la vida o las zarpas de las grandes multinacionales".

Rivarés también reconoció que la actividad de este tipo de vehículos en Zaragoza "no tiene nada que ver" con la de Madrid o Barcelona "por importancia turística y dimensiones de población" y, de hecho, no se prevén a orillas del Ebro ni concentraciones ni imágenes de coches bloqueando grandes avenidas o cortando el acceso a puntos de interés.

Paros ‘sine die’

Desde el primer día, la Asociación Provincial Auto-taxi (Apatz), que engloba al 95% del colectivo zaragozano, se ha desmarcado de "cualquier actuación coercitiva" y ha pedido que las movilizaciones sean pacíficas. Más guerreros son en la Federación Elite, desde donde llaman a la resistencia y ayer por la tarde volvieron a desfilar tocando sus cláxones por el paseo de la Independencia.

Los conductores agrupados en Apatz se reunirán esta tarde en asamblea (la cita es a las 16.30 en la sede de la Cámara de Comercio) para analizar la oferta hecha ayer por el Ministerio de Fomento en la reunión a la que acudió Mariano Morón en representación de los taxistas zaragozanos. Está previsto que en esta asamblea se debata hasta cuándo podría prorrogarse la huelga y, también, cómo mantienen los servicios mínimos que, hasta ahora, permiten operar al 10% de la flota, esto es, 170 vehículos, que garantizarán el funcionamiento de los coches adaptados y los traslados a centros sanitarios.